Se sienten los pasajeros del último vagón en el tren de los inversores. Afirman que son ahorristas y no especuladores. Y que el Gobierno incentiva la fuga de divisas al igualarlos a los "fondos buitre" a los que tanto critica.
La Asociación de Ahorristas de la República Argentina (AARA) realizó un estudio comparativo sobre el resultado de las inversiones luego de la pesificación y el default declarado a fines de 2001. Las cifras difundidas por AARA -uno de los tres comités locales que fueron recibidos por el Ministerio de Economía para dialogar sobre la deuda en default- demuestran que los bonistas que compraron sus títulos al 80% y los afiliados a las AFJP se encuentran entre los inversores más perjudicados por los resultados financieros de los últimos dos años: perdieron un 69 y un 63%, respectivamente.
La negociación de la deuda continuará esta semana con el Comité Global de Acreedores y la Comunidad de Intereses de la Argentina en Alemania.
El cuadro comparativo de AARA, que comprende el período diciembre 2001-febrero 2004, continúa con los acreedores hipotecarios en moneda extranjera (que cobraron a $ 1 más CVS por dólar), con una pérdida del 62%; los que compraron bonos al 60%, con un 58%; los poseedores de seguros de retiro, con un 54%; las hipotecas con el sistema de "esfuerzo compartido", con un 33%, y los depositantes de plazo fijo, con un 29 por ciento de caída.
Luego del resultado neutro de los poseedores de cajas de seguridad, comienza la rueda de los ganadores.
El podio
En este caso, el podio está integrado por los inversores en la Bolsa porteña, con un 83% de ganancia; quienes compraron euros (70%), y la Bolsa paulista (51%).
Luego continúan los que invirtieron en los denominados "fondos buitres" con una ganancia del 25%; los tenedores de plazos fijos en el exterior, con un 10%; los bonos de los Estados Unidos, con un 8%, y los deudores bancarios con hipotecas del 50% de su propiedad, con un 3 por ciento.
Carlos Báez Silva, representante de los bonistas en AARA, dijo a LA NACION que el gráfico refleja que "el que hizo ahorros en el país perdió en diversos grados; quien guardó sus ahorros bajo el colchón o en una caja de seguridad obtuvo un efecto neutro. Y el que sacó el dinero afuera del país logró una ganancia".
"Parece que el mensaje del Gobierno es que ahorrar acá es malo y fugar divisas es bueno. Es decir, se trata de hacer lo mismo que hizo Kirchner cuando era gobernador, que sacó el dinero de la provincia al exterior", disparó Báez Silva.
Según AARA, los tenedores de bonos o cuotapartistas de fondos comunes de inversión "son personas que invirtieron sus ahorros siguiendo, en la mayoría de los casos, los consejos de sus agentes o la publicidad que hizo en su momento el Gobierno, donde se invitaba e incitaba a los ahorristas para que compraran bonos; es por ello que lo consideramos deuda pública interna: no son especuladores ni forman parte de los fondos buitres".
La Asociación, que también reúne a ahorristas bancarios, consideró que "una manera muy clara de distinguir y separar al inversor del especulador sería tomar como valor nominal el precio de compra del tenedor, lo que redundaría en una gran disminución de la deuda pública, si las afirmaciones oficiales fueran ciertas acerca de que la mayoría de los bonos está en manos de especuladores o buitres".
El analista Rafael Ber, de la firma Argentine Research, coincidió con el diagnóstico de AARA. "Entre los peores resultados en inversiones en los últimos dos años se encuentran los bonistas en default y los depositantes en dólares, a los que no se les reconoció el valor original de sus ahorros. Los más beneficiados, sin duda, fueron los tenedores de títulos posteriores al default", dijo Ber a LA NACION.
Sin embargo, los analistas Miguel Bein y Luis Secco consideraron que no se puede hacer una división tan tajante entre ganadores y perdedores, ya que "muchas personas tenían sus carteras diversificadas y tal vez al principio perdieron pero luego pudieron ganar".
Para Secco, "los que más ganaron fueron los que estaban endeudados en dólares con los bancos, y los que más perdieron son los que pagaron impuestos y están afiliados a una AFJP". En cambio, Bein consideró que la pérdida para los afiliados a las AFJP "es temporal", y opinó que los bonos posdefault son las estrellas del mercado en los últimos meses.
Por Martín Kanenguiser - De la Redacción de LA NACION


