El ex ministro de Economía señaló hoy que en la Argentina "las provincias están atrapadas entre políticas decididas por la Casa Rosada -que implican subas de gastos provinciales- y la concentración de recursos en el gobierno central"
Fue durante su exposición sobre "Descentralización y Desarrollo" en el Foro Internacional del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que se lleva a cabo en Washington.
Lavagna, quien aceptó una invitación especial del BID para participar del Foro, sostuvo que "la experiencia argentina de los años 90 en los que hubo un fuerte proceso de descentralización fue muy negativa".
"La descentralización, sobre todo en materia de salud y educación, se hizo sin asegurar los recursos financieros necesarios", agregó. "Sirvió, por entonces, para demostrar que las cuentas públicas mejoraban y satisfacían las exigencias de organismos como el FMI y los mercados financieros, donde se colocaba la deuda que finalmente colapsó en el año 2001", señaló Roberto Lavagna ante un auditorio de destacados diplomáticos y economistas internacionales.
Siguiendo con su disertación, el ex ministro de Economía explicó que "esta realidad sólo se modificó después de la gran crisis del 2001. En los años 2003, 2004 y 2005 las provincias por primera vez en más de medio siglo tuvieron superávit. Ya en 2006 y 2007 el déficit provincial reapareció por efecto combinado de gastos decididos desde el gobierno central y estancamiento relativo de los ingresos". Y enfatizó que "después la recaudación fiscal se concentró en impuestos que no se coparticipan".
Por último, señaló que la descentralización se ha visto afectada en los años 90 "por un traspaso de gastos sin recursos equivalente", y en la actualidad por "una concentración de recursos tributarios combinada con aumento de los gastos no discrecionales provinciales como resultado de políticas decididas desde el Poder Ejecutivo Nacional".
Lavagna, quien aceptó una invitación especial del BID para participar del Foro, sostuvo que "la experiencia argentina de los años 90 en los que hubo un fuerte proceso de descentralización fue muy negativa".
"La descentralización, sobre todo en materia de salud y educación, se hizo sin asegurar los recursos financieros necesarios", agregó. "Sirvió, por entonces, para demostrar que las cuentas públicas mejoraban y satisfacían las exigencias de organismos como el FMI y los mercados financieros, donde se colocaba la deuda que finalmente colapsó en el año 2001", señaló Roberto Lavagna ante un auditorio de destacados diplomáticos y economistas internacionales.
Siguiendo con su disertación, el ex ministro de Economía explicó que "esta realidad sólo se modificó después de la gran crisis del 2001. En los años 2003, 2004 y 2005 las provincias por primera vez en más de medio siglo tuvieron superávit. Ya en 2006 y 2007 el déficit provincial reapareció por efecto combinado de gastos decididos desde el gobierno central y estancamiento relativo de los ingresos". Y enfatizó que "después la recaudación fiscal se concentró en impuestos que no se coparticipan".
Por último, señaló que la descentralización se ha visto afectada en los años 90 "por un traspaso de gastos sin recursos equivalente", y en la actualidad por "una concentración de recursos tributarios combinada con aumento de los gastos no discrecionales provinciales como resultado de políticas decididas desde el Poder Ejecutivo Nacional".


