La conformidad oficial para el uso comercial de maíces resistentes al herbicida glifosato abre una nueva trocha agronómica para los productores.

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¿Qué son y que representan los maíces RR? Son híbridos a los que se los ha mejorado con la inyección a través de un "cañón génico" (herramienta de uso biotecnológico) de "microproyectiles" de una sustancia que se denomina "cp4epsps" y que tiene la particularidad de anexar a las plantas de maíz resistencia al glifosato.

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Esto resulta un hecho tecnológico que guarda muchas analogías con el de la soja transgénica. Las repercusiones agronómicas esperadas, si bien son trascendentes para el campo argentino, no serán seguramente de la revolucionaria gradación con la que contó la oleaginosa.

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Desde el sesgo estrictamente agronómico, ¿cuáles son las ventajas que podrían aportar materiales de maíz resistentes al glifosato? Básicamente, producir maíz en zonas marginales o en zona submarginales que tiene aprietos de malezas serios o muy serios. Aunque no se descarta la producción de maíz RR en las zonas originales del corazón maicero.

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Con un solo herbicida, que hoy está costando cerca de 2,3 (o algo más) dólares por litro, se podrían controlar malezas gramíneas anuales y perennes, y cebollín, entre otras de hoja ancha. Así lo deducen los productores de varios puntos del país.

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Soluciones

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Para Alberto Marchionni, del sur de Santa Fe y sudeste de Buenos Aires, "el maíz RR es ideal para campos con problemas de gramíneas perennes". José Borleto, de Córdoba, que siembra en varios puntos del país, dijo que "se trata de una solución extremadamente práctica para incluir al maíz en rotaciones en zonas tales como Santiago del Estero, Chaco, San Luis, entre otras". Según Cristian Broglia, productor y asesor del norte de Buenos y Aires y sur de Santa Fe, el maíz RR es un hecho positivo y abre aún más el panorama varietal del maíz que este año contó con variedades comerciales que no llegaron a su mejor performance genética. "Francamente esperaba mejores rindes de variedades muy promocionadas".

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Los comentarios de una decena de productores de distintas zonas pueden resumirse de la siguiente manera:

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Están de acuerdo con la siembra de una parte de sus programas de maíz con materiales RR.

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Podrían pagar más por estos materiales si no se resienten los rindes.

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Están satisfechos con la posibilidad de contar con una alternativa agronómica suplementaria.

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"Se trata de aplicar un herbicida, asequible, no selectivo (de acción total y resuelta) sobre una gramínea anual como el maíz resistente", dicen algunos. Esto hubiera resultado una utopía grande como el monte Everest para un ingeniero agrónomo de la década del 80.

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Ahorro de los costos

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Según Pablo Vaquero, director del negocio de Semillas de Monsanto, "se podrían economizar desde 7 hasta a 8 dólares por hectárea en el control de malezas para el maíz". Vale apuntar que un control convencional con atrazina y Guardian puede costar unos 20-25 dólares por hectárea, dependiendo de la zona en donde se esté trabajando.

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Vaquero estima que "la aprobación el maíz RR es el paso previo a la oficialización del uso de los maíces Bt y RR en la misma planta, proceso que podría combinarse en el futuro".

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El directivo no está en condiciones de asegurar cuál sería el nivel al que se vendería la semillas de maíz RR, pero las estimaciones indican que habría que agregar unos 22 dólares por cada bolsa (sirve para sembrar una hectárea) de germoplasma convencional, que cuesta unos 60 dólares, en total serían 82 dólares. "Son los mismos 22 dólares que vale una bolsa de Bt", comentó un asesor de los grupos CREA.

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"Con la incorporación del maíz RR se podrían esperar entre 300.000 y 500.000 hectáreas más de este cultivo en zonas nuevas", agregó Vaquero. Según estimaciones del INTA, quedan aún cerca de 5 millones de hectáreas en la Argentina para ser sembradas con cultivos.

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"La aplicación del herbicida puede hacer desde que el maíz está en V2 (dos hojas verdaderas extendidas y con el capuchón transparente o hialino en la base del tallo) hasta V8 (8 hojas del mismo tipo), esto abre una amplia ventana de aplicación", finalizó Vaquero.

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Otras propuestas de uso del maíz RR por parte de esa compañía son:

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Intersiembra (siembra de maíz de ciclo corto entre las líneas del trigo aún sin cosechar).

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Maíz de segunda (siembra luego del trigo).

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"Strip intercropping" (siembra en franjas de maíz y de soja alternadas) con la finalidad de controlar las malezas con un solo herbicida.

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Una de las nuevas prácticas que seguramente nacerá a partir del maíz RR es el control del "maíz guacho", es decir, el que nace de las pérdidas de la cosechadora.

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Se asegura que en los Estados Unidos el "maíz guacho" no se controla por parte de la mayoría de los productores, dado que el intenso frío lo puede helar.

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En la Argentina es muy probable que haya que controlarlo con herbicidas específicos. En este sentido Monsanto recomienda utilizar en soja RR los siguientes principios activos: quizalofop, haloxifop y cletodim.

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Continuación

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En rigor, la probable autorización actual del maíz RR representa una extensión de los sucesos biotecnológicos que se iniciaron en la Argentina a mediados de los 90 con la soja RR (resistente al glifosato), continuaron el algodón Bt (tolerante a una familia de insectos denominados lepidópteros que tienen un aparato bucal masticador y producen graves daños a los cultivos) y RR y también con los maíces Bt.

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La luz verde para la producción y comercialización de estos híbridos de maíz parece encenderse o, por lo menos, está más cerca de hacerlo que en cualquier otro momento del pasado. Así, la Argentina se sumaría a los Estados Unidos, Canadá, Bulgaria y Sudáfrica, países que ya los aprobaron.

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Los maíces RR estuvieron muy cerca de ser aprobados a fines de los últimos años del siglo XX, pero ello no ocurrió debido a las consecuencias que podría haber provocado en el mercado. Por entonces los europeos no querían saber nada con la biotecnología. Ahora las cosas están cambiando.

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Aunque no trascendió públicamente, a fines de los 90, Monsanto, por medio de su socia Dekalb llegó a perder unos 5 millones de dólares en semillas de maíz RR. Se había hecho voluminosas producciones de semillas y hasta se había promocionado planes comerciales de incentivos para los miembros de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid). Dichas semillas habrían sido quemadas.

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El evento NK603 de Monsanto pasó muchas pruebas y los productores podrían contar con una cantidad apreciable de semillas de maíz RR para la campaña 2004-05.