La Agencia Nacional de Investigación (ANR) y el Centro Nacional de Investigación
científica (CNRS) franceses analizan el impacto del cambio climático a nivel del terruño vitícolas, también denominado "terroir".
Del estudio, que se inició en enero de 2008 y se terminará a finales de este año, participan 16 viñedos experimentales en la Argentina, Chile, Bolivia, Uruguay, Africa del Sur, España, Portugal, USA, Nueva Zelanda, Marruecos y Francia.
En el caso argentino, se estudian los viñedos que la Bodega Alta Vista posee en Mendoza y Cafayate, Salta, informó la compañía en un comunicado.
Se espera obtener la modelización del cambio climático a la escala fina del Terroir a mitad de 2011. Paralelamente, el CNRS y la Universidad de Cuyo (UNCU) desarrollan un nuevo programa de Gestión e impactos del Cambio Climático, en el cual se estudian las adaptaciones de las prácticas culturales y enológicas a estos modelos de cambio climático.
Como países pilotos a nivel mundial para conducir las investigaciones fueron elegidos Francia y la Argentina. Las investigaciones reúnen a más de 30 investigadores así
como una decena de estudiantes de máster y doctores de disciplinas diferentes y complementarias (geógrafos, climatólogos, agrónomos, físicos de la atmósfera, geomatemáticos, meteorólogos) de 13 nacionalidades.
El objetivo es adaptar las técnicas de producción a los cambios de expresión de la vid debido a los cambios climáticos. El calentamiento de la zona afecta el desarrollo de la planta y obliga a realizar tareas específicas para conservar la misma calidad de uva y estilos del vino.
“La ambición es determinar el impacto del cambio climático a la escala de los terroirs y así adaptar nuestras prácticas culturales y de vinificación para mantener la tipicidad e identidad que caracterizan los vinos de Alta Vista”, explica Philippe Rolet, gerente general de la bodega.


