La megamuestra Expoagro 2010 arrancó con el pie derecho: las últimas tormentas, que regaron toda la región, dejaron en el predio 18 milímetros, insuficientes para convertir la tierra en barro, suficientes para seguir regando un suelo que en los próximos meses dará una buena cosecha. Ayer, los gobernadores Daniel Scioli y Hermes Binner dejaron inaugurada la muestra que apenas abrió sus puertas recibió a los primeros 15.000 visitantes, según datos de la comisión organizativa.
El ministro de Agricultura, Julián Domínguez, hizo anuncios durante su presencia en la expo como la devolución de retenciones del trigo a los productores y la ampliación en 2.000 toneladas de la cuota Hilton, los cortes de mayor valor que se embarcan a Europa.
Según el funcionario, el país contará este año con una cosecha de entre 93 y 95 millones de toneladas, cercana al récord logrado dos años atrás, antes de la gran sequía. Aunque muchos consideran exagerado ese pronóstico, es evidente el cambio de tendencia: el campo está dejando atrás un mal período y quiere retomar la senda virtuosa del crecimiento.
Una cosecha abultada y buenos precios aseguran una inyección de US$ 20.000 millones a la economía local, que se derraman. Se nota aquí: los productores preguntan y hasta se animan a comprar.
En ese contexto, Scioli consideró que “van quedando atrás los desencuentros”, en obvia referencia al largo conflicto con el campo. Pero su par de Santa Fe, Hermes Binner aclaró que hace falta profundizar. “Con el campo falta el diálogo como actitud”, observó.
El bonaerense llegó acompañado por el titular del Banco Provincia, Guillermo Francos, y lanzó créditos por $350 millones.
En el establecimiento La Flamenca, en el kilómetro 121 de la ruta 9, a poca distancia de Baradero, también se percibió que los productores tienen ganas de dedicarse nuevamente a lo suyo. Sólo uno de ellos, en la recorrida que realizaron los funcionarios, levantó el tono para recordarles que “con el campo no se jode”. Pero los demás concentraron su atención en la variada oferta de insumos, servicios y maquinaria que ofrecen unas 700 empresas expositoras.
Por la muestra también anduvo el presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, Cristian Amuchástegui, quien la semana pasada se reunió con Cristina Kirchner y le recordó que con la cosecha que se espera de soja se necesitará nuevamente más de 4 millones de viajes de camión.
La gente de Maizar, que agrupa a la cadena del maíz, saludó una reciente decisión oficial: la liberación de 10 millones de toneladas para la exportación. “Si seguimos así podemos llegar a producir 30 millones de toneladas en la campaña 2011/12”, se entusiasmó su titular, Santiago del Solar.
Esta Expoagro, que permanecerá abierta hasta el sábado, será también caja de resonancia para quienes piensan que el camino por recorrer no será sencillo. Por caso, hoy visitarán la muestra el vicepresidente Julio Cobos y el ex presidente Eduardo Duhalde, dos posibles candidatos a la sucesión de los Kirchner. También llegarán los máximos referentes de la Mesa de Enlace, que todavía no consiguen establecer una negociación franca y productiva con el Gobierno.
Al caer la tarde, Binner reflexionó: “En Expoagro se ven aires de esperanza. Tenemos un sector productivo que acepta y compra innovaciones tecnológicas, de manera que es una gran esperanza comenzar el Bicentenario con una exposición de esta naturaleza, con humedad y con productores con los brazos en alto. Esto ha pasado hace 100 años y tiene que volver a pasar ahora”.


