Tras las denuncias por presuntas irregularidades en el pago de compensaciones otorgadas al sector de engordadores de hacienda a corral (feedlots), la cuestionada Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca) congeló el desembolso de las compensaciones al sector. Esta medida generó que en pocos meses los corrales de engorde bovino comenzaran a vaciarse, porque los dueños reponen “sólo 1 de cada 3 animales que van a faena”, según indicó el presidente de la Cámara de Engordadores (Caehv), Juan Carlos Eiras, quien agregó que “siguen trabajando los más eficientes y profesionales”.
Producir un kilo de carne en los corrales tiene un costo que ronda los $ 5 el kilo, según explican en el sector engordador. En paralelo, el valor de venta en Liniers para un novillito o vaquillona terminado en un feedlot ayer fue de apenas entre $ 3,40 y $ 3,80 el kilo. A su vez, el precio de compra de la invernada de la hacienda que se está engordando en este momento rondó los $ 3,50 a $ 3,70, con lo cual la pérdida es inevitable, y alcanzaría los $ 200 por animal que pasa entre 90 y 100 días en confinamiento.
Por eso la aparición de supuestos pagos indebidos de compensaciones que frenó la erogación de dinero pone en riesgo la continuidad del negocio.
Según estimó Eiras, a principios de octubre había cerca de 1,5 millón de animales en los feedlots, y actualmente quedan poco menos de 1,3 millones y se espera que durante noviembre continúe un proceso de vaciamiento que dejará en carrera sólo a los grandes feedlots que engordan hacienda para frigoríficos exportadores. Por el contrario, serán historia los de menor envergadura y los caseros, que surgieron en los últimos años de la mano del beneficio que implicaba el cobro de compensaciones, y que hacía rentable el negocio.
Sin embargo, los engordadores tienen sus esperanzas puestas en que la Oncca retome los pagos de las compensaciones. Eiras señaló que “ya se iniciaron las negociaciones para que se reactiven”. Sin embargo, al día de hoy tienen que conformarse con la promesa de que los pagos se reanudarán en pocas semanas, una vez que Juan Manuel Campillo, flamante titular de la Oncca, y su equipo terminen de tomar posesión de sus funciones al frente del organismo.
Como adelantó El Cronista, una resolución publicada ayer en el Boletín Oficial da un paso hacia la reactivación de los pagos. La norma establece que los municipios deberán dar fe de la producción que cada empresa declare tener para acceder a las compensaciones. Esa normativa también establece un plazo de 60 días para el pago de esos beneficios una vez aprobada la solicitud. Así, se acortarán los plazos, que están hoy en el foco de las críticas del sector por los perjuicios financieros que ocasionan las demoras.
El sector del engorde a corral fue uno de los que más compensaciones recibió a través del mecanismo de subsidios implementados por el Gobierno. Los engordadores de hacienda a corral recibieron $ 580,9 millones en 2009 y $ 1.229,4 desde principios de 2007, fecha en que se puso en marcha el sistema por la necesidad de compensar al sector ganadero por los constantes incrementos de sus insumos – entre ellos, la soja– en un mercado de precios controlados para evitar incrementos en el valor de la carne se dispare en la góndola.
Según los engordadores, el vaciamiento de los feedlots pone en riesgo el abastecimiento del mercado. Las estimaciones indican que en diciembre habrá faltantes de carne, y que esto se agravará durante 2010, cuando se prevé que habrá hasta 3 millones de terneros menos.
