Detrás de esa leyenda volcada en una amplia pancarta marcharon por el centro de esta ciudad los sectores que componen la actividad portuario marítima bahiense junto a industriales, comerciantes y ruralistas.

La concentración convocó a unos cuatrocientos manifestantes y la columna más ruidosa fue la de los gremios portuarios que lanzaron bombas de estruendo y se hicieron oír con redoblantes, bombos y varios cánticos durante el trayecto de cuatro cuadras que separan al teatro municipal del principal edificio de gobierno.

Allí se leyó un texto consensuado por los convocantes a la marcha, entre los que figuraban además de las entidades portuarias, la Corporación del Comercio y de la Industria y la Asociación de Ganaderos y Agricultores. Entre la multitud flamearon banderas de la Federación Agraria y del sindicato de Aceiteros.

Así, se calificó de "legislativamente insostenible, económicamente ruinosa e impositivamente inaceptable" a la aplicación de un tributo a las cargas que atraviesen el puerto local, paralizado desde el jueves a raíz de la media aprobación del paquete impositivo en La Plata.

Entre otros efectos, el documento advirtió que el impuesto "se trasladará al productor en el caso de las exportaciones y al consumidor en las importaciones" y la medida "significará una nueva transferencia de ingresos al poder central". En esa línea, acusó a Daniel Scioli de actuar "en contra de los intereses provinciales" y lo instó a gestionar ante la Nación "los fondos de la coparticipación federal que realmente le corresponden a la provincia".

Agustín Moreno, representante de la Cámara de Armadores y director del consorcio público-privado que administra el puerto, repudió la actitud de los dos diputados oficialistas de la Sexta Sección Electoral Marcelo Feliú y María González de Rivas que votaron a favor del paquete impositivo. La multitud respondió a la mención con insultos.