Los esquemas intensivos de producción bovina, avícola y porcina generaron un crecimiento sostenido en los últimos años de la producción de alimentos balanceados, de más del 10 por ciento anual, asociado a un sistema de nutrición cada vez más cuidado.

De acuerdo a estimaciones del sector, el consumo del año pasado fue de 13,5 millones de toneladas frente a los 8,5 millones de un quinquenio atrás, es decir un 58.9 por ciento de incremento para el período 2004-2008.

En términos generales el incremento de los consumos de los últimos años y las expectativas de una demanda creciente, plantea desafios sobre la manera como el sector va a satisfacer las necesidades de alimentos, garantizando su calidad, seguridad y preservando el medio ambiente.

La Cámara Argentina de Empresas de Nutrición Animal elaboró un reciente informe en base a un Coeficiente Equivalente Animal, que es un valor estimado que permite inducir la cantidad de kilos de alimento balanceado necesarios para producir un kilo de carne.

De este análisis se desprende que gran parte del crecimiento del rubro de nutrición animal de los últimosaños se explica por la intensificación de la ganadería vacuna, ganadería lechera, y aviar, con más de 3,5 millones de toneladas de balanceados producidas para cada uno por año.

El resto de la torta -unida a la búsqueda de una mayor eficiencia en la alimentación- se reparte entre los por-cinocultores, avicultura de postura, el resto de actividades que requieren alimentos balanceados y las mascotas.

En el sector bovino, el sistema de producción pastoril que ha sido la característica histórica de producción de carne vacuna en la Argentina se encuentra en un permanente cambio hacia la actividad del engorde a corral o feedlot, tal como ha ocurrido en países altamente productores de carne de calidad de acuerdo a lo que requiere el mercado. Hoy, más del 80 por ciento (11,9 millones de cabezas) de los bovinos que van a faena han consumido en alguna etapa de su vida concentrados (alimentos balanceados) comerciales o elaborados en el establecimiento, de los cuales 42 por ciento (5 millones de cabezas) provienen de engorde de corral, según Caena.

El consumo en los últimos años superó los 5 millones de toneladas de alimento completo en fórmulas en las que el maíz participa en un 60 por ciento de la conformación, lo que da una muestra del alto uso de cereales en relación al que generan otras especies productivas.

La alimentación representa más del 75% del costo de producción y los próximos años se caracterizarán por mejorar la eficiencia de producción con mejores índices de conversión que redundarán en menos kg de alimento gastado por kg de carne producido.

La actividad por su dinamismo y constante crecimiento continuará requiriendo de una alta profesionalización de las empresas del sector proveedoras de ingredientes aditivos (vitaminas, minerales, promotores) mejoradores de la calidad y eficiencia de nuestro sistema de producción.
En el sector aviar, se espera que a la luz de la crisis internacional el ritmo de crecimiento de la producción se desacelere pero manteniéndose en los niveles del ultimo año, la que alcanzó un total de 1.400 millones de toneladas, con un crecimiento del 12 % en relación al 2007.

La faena actual supera los 2.200.000 de pollos, manteniendo cifras de crecimiento que se sitúan en el 8% dando una muestra del alto desarrollo del sector.

El consumo de alimentos balanceados requeridos para este año supera las 3.300.000 toneladas, y fortalece un futuro promisorio para ese sector y el de alimentos balanceados.

13,5 millones de toneladas de alimentos balanceados se consumieron en 2008.

58,9 por ciento creció la producción de alimentos balanceados en el quinquenio 2004-2008.

Vetifarma S.A., desde hace rnás de 14 años, basó su crecimiento sustentable en una estrategia de compromiso con la calidad, y es considerada dentro de la industria como pioneros en cuanto a contar con un Laboratorio de Control de Calidad en el interior mismo de sus instalaciones, sin haber tercerizado esta tarea nunca.

El proceso de elaboración de un alimento balanceado debe enfocarse desde su origen en un sistema de producción con estrictos controles de calidad en todas y cada una de las distintas materias primas que se utilizan en su formulación, proceso de las mismas, almacenamiento y distribución.

Este proceso garantiza la inocuidad de los alimentos balanceados elaborados y la estabilidad de todos los aportes nutricionales que realiza a las explotaciones pecuarias.

La empresa invirtió fuertemente en equipos y en capacitación de sus recursos humanos, para realizar la tarea con responsabilidad y tiempos acordes a los requerimientos de la industria.

Así, inauguró en 2008 una nueva línea de producción, con la que llegó a cinco en las instalaciones del parque industrial La Plata.

Esta última línea fabril está exclusivamente dedicada a la fabricación de núcleos vitamínicos y minerales, garantizando la imposibilidad de contaminaciones con antibióticos o quimoterápicos, lo cual otorga a la industria exportadora de carne una trazabilidad garantizada

CLARIN