Es un escándalo que los gobernadores hayan tolerado semejante agresión a los principios federales fundacionales de la República Argentina. Las administraciones provinciales se encuentran casi en bancarrota por la mala administración de esos gobernadores y por su genuflexión ante la Nación al no defender los legítimos intereses de sus territorios. Aqui un informe acerca de cuál es la situación que derivará, inevitablemente, en la emisión de cuasimonedas.
08/05/2009 | 17:59
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Economía & Regiones). El Gobierno Nacional viene trabajando en planes anticrisis para evitar una recesión económica. Las
transferencias discrecionales a las provincias destinadas a gastos de capital juegan un papel importante en estas políticas, las que en su mayor parte, están a cargo del Ministerio de Planificación Federal y Vialidad Nacional.
• El monto presupuestado para el 2009 de los principales programas a su cargo, totalizan $7.437,7 millones, los que resultan 9,6% inferiores al crédito del 2008, significando menores transferencias a provincias por $785,9 millones.
• Si bien a la fecha, los diferentes programas estas dos dependencias nacionales presentan un nivel de transferencias del 23% respecto al crédito presupuestado, a nivel interprovincial este porcentaje no resultó homogéneo entre las distintas jurisdicciones. Mientras la transferencia de fondos hacia
Misiones, Río Negro y Santiago del Estero presenta niveles muy superiores al promedio, a otras provincias como Catamarca, Santa Fe y Corrientes, les resta percibir el 95%, 97% y 99%, respectivamente, del crédito anual presupuestado.
• Los programas del Ministerio de Planificación Federal que están más avanzados son el de “Desarrollo de Infraestructura Habitacional, Techo Digno”, cuyas transferencias ascendieron a $581,3 millones (40% de lo presupuestado), y Acciones Mejoramiento Habitacional e Infraestructura (31%) y Fortalecimiento Comunitario del Hábitat (21%). En tanto, Vialidad Nacional presenta un porcentaje de transferencia al 15 de abril de 2009 del 27% ($728,4 millones) respecto de los montos presupuestados.
• Si bien aún no puede preverse qué pasará efectivamente con las transferencias discrecionales a provincias en lo que resta del año, una posible disminución de las mismas como consecuencia de las dificultades fiscales que pueda presentar la Nación a partir del segundo trimestre del año, constituye
una señal de alarma en el actual contexto de deterioro de las finanzas públicas provinciales y necesidades sociales y de infraestructura crecientes.
Cuánto cederán las provincias durante 2009
• Tras la coyuntura superavitaria observada entre 2003 y 2005, las finanzas públicas subnacionales ingresaron en un sendero de deterioro sistemático, debido al mayor crecimiento de las erogaciones (especialmente el
gasto en personal) respecto a los recursos provinciales.
• Para el ejercicio 2009 el panorama fiscal de las provincias asoma más sombrío, dado que nuestras proyecciones arrojan un déficit (financiero) consolidado del orden de $8.000 millones, lo que confirmaría que el deterioro de las finanzas subnacionales todavía no ha encontrado su piso.
• Bajo esta perspectiva, las provincias surgen como claras perdedoras dentro del esquema de coparticipación actual, a raíz de lo cual estimamos el monto de recursos que las provincias dejarían de percibir (o cederían) durante 2009, a través de cuatro mecanismos ligados a la coparticipación federal de impuestos: la Coparticipación Total del Impuesto a los Créditos y Débitos Bancarios, la Actualización de las Sumas Fijas, el Cumplimiento de la Garantía del 34% y el Financiamiento vía Recursos Tributarios al ANSES.
• Para 2009, nuestras proyecciones indican que los recursos no transferidos a provincias por la coparticipación parcial del Impuesto al Cheque se ubicarían en torno a los $7.500 millones, situando en $33.106 millones los recursos resignados por las provincias desde la implementación de este tributo.
• El establecimiento de sumas fijas como mecanismo de distribución de recursos puede ser viable en tanto exista estabilidad de precios, pero debido al contexto inflacionario iniciado en 2007 y al fuerte aumento de los recursos y erogaciones provinciales, estas sumas fijas se han licuado tanto en relación a la recaudación que les da origen.
• Al observar la evolución del Fondo del Conurbano, solamente en 1996 se activó el “piso” del 10%, ya que dicho monto ($621 millones) fue inferior a los $650 millones fijados como “techo”. En tanto, en todos los años posteriores, el 10% de la recaudación de Ganancias Neto fue claramente superior a la
suma de $650 millones efectivamente transferida, asignándose la diferencia, denominada “Excedente del Fondo del Conurbano”, al resto de las jurisdicciones subnacionales, excluyendo CABA.
A partir de la devaluación, el 10% de la recaudación de Ganancias neto comenzó a superar ampliamente los $650 millones, convirtiéndose más cuantioso el “excedente” del fondo que el fondo mismo. Esto ocurrió porque la suma fija se mantuvo inalterada, mientras que la recaudación de Ganancias fue experimentando un sostenido crecimiento, sustentado en la mejora del nivel de
actividad y en el fenómeno inflacionario. De esta manera, la Provincia de Buenos Aires ha quedado excluida del reparto de los recursos adicionales generados, dejando de percibir unos $16.330 millones entre el momento de la implementación de la suma fija (1996) y el último ejercicio (2008).
De acuerdo con nuestras proyecciones para 2009, el 10% del Impuesto a las Ganancias Neto ascendería a $5.704 millones, de manera que descontando los $650 millones que efectivamente recibiría la provincia, el monto total de recursos no percibidos superaría los $5.000 millones.
• Por último, el incumplimiento de la garantía del 34% implicaría que las provincias dejen de percibir unos $3.076 millones durante 2009, en tanto que en relación al financiamiento tributario al ANSES, las provincias aportarían nada menos que $25.377 millones durante el mismo período.
El 41,24% restante se distribuye entre el Gobierno Nacional (40,24%) y los Aportes del Tesoro Nacional (1%)11. De acuerdo a estos coeficientes, sobre un total de $218.145 millones para el período bajo análisis, el aporte provincial total12 habría ascendido a $127.793 millones, en tanto que el Tesoro Nacional habría cedido unos $88.171 durante igual período, quedando los $2.181 millones restantes como aporte de los fondos de ATN. Incluyendo los ATN, se obtiene que los estados subnacionales habrían resignado en sólo 10 años, casi $130.000 millones, un volumen de recursos equivalente a más de la totalidad del stock de deuda provincial, el cual ascendería a $99.130 millones en 2009.
Para el presente ejercicio, sobre un monto total de $43.188 millones, las provincias aportarían nada menos que $25.377 millones, en tanto que la Nación y el fondo de ATN lo harían con $17.379 millones y $432 millones, respectivamente. De este modo, pese a la delicada situación fiscal que atraviesan, las provincias resignarían recursos por casi $25.500 millones a la ANSeS durante el presente ejercicio.
En base a esto, resulta necesaria una exhaustiva revisión del actual esquema de financiamiento vía recursos tributarios del ANSeS, dado que el motivo que dio origen a la inclusión de las provincias como aportantes netos (la crisis fiscal y financiera del sistema) ha perdido su validez en la actualidad, reforzado asimismo a partir de la reciente reestatización de las AFJP, lo que implicó una
transferencia de un stock de activos de aproximadamente $94.500 millones, y un flujo anual de recursos adicionales del orden de los $14.000 millones.



