La crisis no les da respiro a las materias primas agrícolas. Ayer las cotizaciones volvieron a desplomarse en la Bolsa de Chicago debido a la nueva caída del petróleo, a la apreciación del dólar frente al euro y a las ventas concretadas por los fondos de inversión
Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron pérdidas de US$ 9,74 sobre los contratos diciembre y marzo del maíz, cuyos ajustes resultaron de US$ 115,55 y 121,75 por tonelada. Así, el cereal ya perdió un 62,71% desde el 27 de junio pasado, cuando alcanzó el nivel más alto de la historia: 309,83 por tonelada.
Para el maíz, al igual que para el aceite de soja, volvió a ser ayer una muy mala noticia la caída del petróleo, que perdió otro 6,55% al cerrar en US$ 40,81 por barril. El crudo ya está un 72,29% por debajo del máximo tocado el 11 de julio pasado, de 147,27 dólares. Así, con el descenso del petróleo se acrecientan en los Estados Unidos los interrogantes sobre el futuro de los agrocombustibles, al menos sobre aquellos que se obtienen a partir de granos.
Junto con los problemas en la industria del etanol, cuya rentabilidad está en los niveles más bajos desde que ese combustible se constituyó en un complemento al petróleo, también preocupa la evolución de la demanda de maíz como forraje, debido a la crisis que golpea a las plantas avícolas y a la creciente competencia del trigo forrajero. Los operadores creen que en su próximo informe mensual (el jueves próximo) el USDA recortará sus estimados de consumo de maíz para etanol y para alimentación animal.
En el mercado disponible local, donde los negocios son prácticamente nulos desde que la Oncca restringió la emisión de ROE verdes para exportar, la demanda propuso $ 220 por tonelada de maíz en las terminales de San Martín, Timbúes y General Lagos, $ 40 menos que anteayer. Según la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos (Sagpya) el FAS teórico del grano grueso resultó de $ 300.
El maíz nuevo se cotizó a US$ 85 por tonelada en San Martín, Timbúes, San Lorenzo y Arroyo Seco, con una baja de US$ 4. La pérdida fue de US$ 7 en Punta Alvear y General Lagos, donde los interesados ofrecieron US$ 82 por tonelada.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) las posiciones diciembre y abril del maíz bajaron US$ 2 y 3,80, mientras que sus ajustes fueron de US$ 85 y 93 por tonelada.
En retroceso
Los contratos enero y marzo de la soja en la Bolsa de Chicago retrocedieron ayer US$ 10,10 y 10,38, en tanto que sus ajustes resultaron de US$ 287,89 y 289,27 por tonelada. Con esta nueva caída, la oleaginosa sumó una pérdida del 52,74% desde el 3 de julio pasado, cuando alcanzó su valor máximo, de 609,20 dólares.
Al igual que en el caso del maíz, afectaron a la oleaginosa la caída del petróleo y la fortaleza del dólar frente al euro, que sigue deteriorando el poder de compra de la demanda europea. Además, los fondos continuaron ayer el peregrinaje que los aleja del mercado de materias primas.
En el nivel local, las fábricas ofrecieron $ 640 por tonelada de soja disponible en las terminales de Timbúes, General Lagos, San Martín, Villa Gobernador Gálvez, Ricardone, San Lorenzo y San Jerónimo. Como era de esperar, la Bolsa de Comercio de Rosario indicó que durante la rueda no se relevaron operaciones.
Los exportadores propusieron US$ 620 por tonelada de soja en Bahía Blanca y Necochea, $ 40 menos que anteayer. Según la Sagpya el FAS teórico de la soja resultó de $ 661.
La soja de la nueva cosecha se negoció a US$ 178 por tonelada en San Martín, Arroyo Seco y Villa Gobernador Gálvez, con una baja de US$ 7. El descenso fue de US$ 10 en Timbúes y General Lagos, donde la demanda ofreció 170 dólares.
En el Matba, las posiciones enero y mayo de la soja retrocedieron US$ 9,20 y 8,30, mientras que sus ajustes fueron de US$ 194,30 y 185 por tonelada.
Trigo
Respecto del trigo, los exportadores pagaron ayer $ 400 en Bahía Blanca, San Martín, Ramallo y Timbúes, $ 5 menos que anteayer. El mismo valor fue ofrecido en Necochea, aunque en ese caso no implicó cambios. La Sagpya calculó el FAS teórico en $ 395.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los molinos pagaron entre $ 375 y $ 405 por tonelada de trigo, según calidad y procedencia.
El trigo nuevo se cotizó a US$ 116 en Bahía Blanca y Necochea y a US$ 115 en San Martín, con quitas de 1 y 3 dólares. En el Matba la posición enero bajó US$ 3,20 y cerró en US$ 114,70.


