Estarán arribando en la fecha (jueves 22) a nuestra provincia los inspectores
veterinarios procedentes de la Unión Europea, quienes serán los encargados de
efectuar un relevamiento sobre la situación sanitaria de la ganadería formoseña.
Esto se entiende, constituye un examen para una de las principales cadenas
agroalimentarias formoseñas, sobre el cual, tanto en los sectores públicos como
privados, impera un clima de confianza y optimismo, por lo que se insiste en
remarcarse de manera coincidente: “un gran y responsable trabajo sanitario”.
Es dable señalar que estos inspectores están realizando una auditoría a nivel
nacional, ya que el propósito es hacer un relevamiento sobre la situación
sanitaria de la ganadería del país. Durante la estada de estos técnicos de la UE
en territorio formoseño, se encargarán de hacer una revisión del funcionamiento
del Programa Nacional de Fiebre Aftosa, indicándose desde la esfera de la
Comisión Provincial de Sanidad Animal, que abarcará tanto el control inicial
como la posterior erradicación de este flagelo, que constituye un requisito
indispensable para el mantenimiento y consolidación de las exportaciones de
carne hacia el Viejo Continente, como así también con destino a terceros
mercados.
Desde la esfera técnica de la COPROSA, el cual está conformado por profesional
de la medicina veterinaria local, prevalece un clima de sumo optimismo, el cual
se sustenta en la buena tarea que en términos de vacunación han alcanzando en
todo este tiempo los cinco Entes Sanitarios encargados de inmunizar al rodeo
provincial. Se subrayó asimismo que los monitoreos serológicos, y los controles
enmarcados en las exigentes tareas de vigilancia epidemiológica implementada en
territorio provincial arrojó resultados muy alentadores, a tal punto que ubican
a Formosa en una “excelente situación sanitaria”.
En tanto que el ministro de la Producción y al mismo tiempo presidente de la
Comisión Provincial de Sanidad Animal, Luis Basterra, junto al director de
Producción Animal, Raúl Quintana, señalaron que el último brote de fiebre aftosa
producido en la provincia data de septiembre de 2001, fecha a partir de la cual
no se registran evidencias clínicas de presencia de la enfermedad, por lo tanto
ratificaron que “en todo el territorio de Formosa no hay fiebre aftosa”.
Se atribuyeron los logros alcanzados en materia sanitaria a la gran
participación y esfuerzo de los productores, de sus representantes
institucionales (Entes Sanitarios-Sociedades Rurales), en el fortalecimiento en
estructura logística y de recursos humanos aportados por el SENASA; como así
también de las capacidades puesta de manifiesto por los profesionales de las
ciencias veterinarias y los técnicos vacunadores durante las tareas operativas y
de coordinación.


