Se trata de un espacio que estará en las afueras de la ciudad, tendrá capacidad para albergar mil camiones y transportará el cereal por un ducto subterráneo hasta la planta de San Lorenzo.

Más allá de la presentación oficial del proyecto, que había sido esbozado a grandes rasgos cuando se anunció la inversión, los directivos de Molinos pidieron al gobernador la agilización de los trámites relacionados con el estudio de impacto ambiental que debe elaborar la Secretaría de Medio Ambiente de la provincia, para poder empezar a construir la planta.