Otra jornada negativa en el mercado internacional. El mercado de Chicago de este miércoles, mostró bajas: enero cayó USD 3,30 y marzo USD 3,50. 

Es la tercera rueda seguida en baja.

Obviamente, la falta de noticias respecto a nuevas exportaciones de EE.UU. a China no hacen más que generar incertidumbre la que empuja a los precios hacia abajo.

Sin embargo, como si el cuadro global estuviese dado vuelta, el secretario del Tesoro de EE.UU. sigue afirmando que China va a cumplir con su compromiso de comprar 12 millones de toneladas, antes de terminar el año.

Es curioso que sostenga ello, cuando hasta la fecha solo lo hizo por un volumen de 2.251.000 toneladas. Es decir, apenas el 19% de lo comprometido.

Más curioso es todavía China nunca haya validado los dichos del secretario y de los funcionarios de la Casa Blanca. 

Los traders han comenzado a considerar que las declaraciones de Bessent son más políticas que reales.

Mientras tanto, la gran oferta estadounidense y brasileña continúa presionando sobre los precios. 

La volatilidad de la soja se fundamenta en tres puntos básicos. 

En primer lugar, como seguirá la demanda china. En segundo lugar, cómo será el escenario macroeconómico global. Y finalmente, que pasará con el clima en Brasil y Argentina para la campaña 2025/26.