El escenario comercial de la cebada se complica en cuanto a los excesos de agua que perjudican gran porcentaje de la calidad de los cultivos a cosechar próximamente en diciembre. El problema más grande es que no se la puede vender siquiera como forrajera.
El Asesor de CREA, Eduardo Soto, afirmó a El Canal Rural que “el exceso de agua provocó la entrega anticipada del cultivo, con lo cual quedaron granos que no dan calidad para cervecera ni para forrajera. Es una incógnita saber qué va a pasar con esa cebada que no puede ser destinada a nada”.
Por otra parte, Delfín Morgan de la Corredora Morgan García Mansilla y Compañía aseguró a Agrositio que “lo positivo de esta campaña fue el mayor volumen percibido debido a la reducción de área de trigo, por eso, se volcó mucha gente a la cebada. Lo que complica su calidad es la cantidad de lluvias y humedad”
Morgan explico: “Todavía no tenemos números acerca del cierre de ésta campaña, que finaliza en Diciembre, debido a todas las inclemencias climáticas que estuvimos viviendo. Hoy tendríamos que esperar a las estimaciones de las Bolsas de Buenos Aires y de Rosario con respecto a merma”
“La cebada cervecera se concentra en la zona sur, sudeste, sudoeste de Buenos Aires. Lo que va a crecer más va a ser la producción de cebada forrajera porque hay menos riesgos en cumplir exigencias de calidad y, a su vez, los mayores compradores se focalizan en la forrajera que en la cervecera. Obviamente el valor de la cervecera es mayor que la forrajera, pero este año ocurrió que estaban a la par porque hubo una demanda de forraje que hizo que explotara este mercado”, aseguró uno de los dueños de la Corredora.
Asimismo, Morgan dijo que Argentina es uno de los principales 5 exportadores de cebada a nivel mundial ya que nos posicionamos muy bien y afirmó que “para lo que es producción forrajera nuestros principales compradores son Medio Oriente y Arabia Saudita”
“El mercado de cebada cervecera es pequeño y vidrioso, mientras que el de cebada forrajera tuvo una situación de precios irreal en la última campaña, a partir de los recortes registrados en la producción mundial de maíz: eso no necesariamente va a repetirse en 2012/13”, indica Alejandro Conti al USDA, miembro del CREA Tandil y uno de los socios de la empresa Acción Coordinada de Servicios Agroindustriales (Acsa S.A.), que se dedica a la exportación de especialidades agrícolas (entre las cuales se incluye la cebada cervecera).
Según un informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) se logró trillar tan solo el 1,5 % del área cosechable a nivel nacional, entregando un rinde medio de 29 qq/ha. En números absolutos la superficie recolectada alcanza las 16 mil hectáreas, acumulando un volumen parcial de 47 mil toneladas. Cabe mencionar que gran parte del área sembrada con este cultivo fue afectada por numerosas enfermedades debido al clima predispuesto para el desarrollo de las mismas.
En el oeste y centro de Buenos Aires aún no comenzó́ la trilla, no obstante el 25 % del área se encuentra en grano duro, próximo a cosecha. El resto de la superficie de cebada transita grano lechoso-pastoso en condiciones de buenas a muy buenas, aunque se destaca que en estas zonas se perdieron numerosas hectáreas producto de las inundaciones de agosto-septiembre.
Finalmente, hacia el sur bonaerense y pampeano, donde se concentra más del 70 % de la superficie nacional, la evolución de los cuadros de cebada es muy favorable.
Según las cifras del Ministerio de Agricultura, la cosecha 2011/2012 alcanzó los 4,08 millones de toneladas, un volumen récord, con 1,16 millones de hectáreas implantadas. "El volumen total recolectado fue un 38% superior al de la campaña anterior, cuando se cosecharon 2,9 mill./t. El rinde promedio fue de 35,4 qq/ha", apuntó María Eugenia Gallegos, de la corredora Roagro, en una reciente jornada organizada por los CREA de la zona norte de Buenos Aires. Se estima que de la cosecha total se destinarán 1,1 mill./t al mercado interno y 3,3 millones a la exportación.
¿Qué conviene producir?
Según un comunicado de CREA, en la campaña 2011/12, por segundo año consecutivo, en muchos campos fue más conveniente producir cebada forrajera que sembrar el cultivo bajo contrato con destino a maltería.
En la campaña nacional 2011/12 se habrían producido 4,60 millones de toneladas de cebada sobre un área del orden de 1,10 millones de hectáreas. Está previsto que un volumen de 1,8 millones de toneladas sea exportada como cebada forrajera y que 1,2 millones sean colocados como cervecera. De aquí en más (en 2012/13) el mayor crecimiento se registrará en el mercado forrajero”, apunta Marelli, responsable de cebada de la filial local de Toepfer (compañía que es una de las principales operadoras del negocio junto con Cargill y Maltería Quilmes).
Por otra parte, una investigación de la FAUBA afirma que “producir cebada de calidad cervecera en lugar de forrajera puede ser algo más caro pero tiene dos ventajas. En primer lugar el precio obtenido es mayor. Además la producción nacional de cebada cervecera es mucho mayor que el de la forrajera, por lo cual se dispone de un mercado más amplio donde ubicar el producto”.
Nutrientes y fertilización necesarios para la cebada
Según analizó el Ing. Agr. Daniel H. Germinara en ON24, “las raíces de la planta de cebada apenas alcanzan 1,20 m de profundidad y su ciclo es más corto que el trigo, por eso exige más agua al principio de su desarrollo que al final. Lo importante en este cultivo es el rendimiento y la proteína que, según las condiciones de la temporada, debería estar entre el 10 y el 12%, sin olvidar el calibre, que es otro factor muy importante. La fertilización nitrogenada juega un rol protagónico para obtener altos rendimientos con contenidos de proteína en esos rangos. El Fósforo es el otro nutriente que hay que tener muy en cuenta”
“Siempre es importante medir los nutrientes que hay en el suelo antes de sembrar, sobre todo para saber cuánto nitrógeno hay, en función de los dos parámetros a lograr. Solo el análisis de suelo puede determinar con precisión cuánto de este nutriente se debe aplicar. Como valor orientativo, debería haber disponible entre 22 a 40 kg de Nitrógeno/tn de grano para lograr un contenido proteico de 10 a 12%”.
Por su parte, Pablo Prystupa, de la Cátedra de Fertilidad y Fertilizantes de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) junto a un grupo de especialistas en fertilización del INTA, realizaron una amplia red de experimentos de fertilización en la cebada a lo largo de la provincia de Buenos Aires. “Observamos que la dosis de nitrógeno que requieren los cultivos varía de acuerdo a las lluvias. En condiciones de buena disponibilidad de agua, la cebada requiere entre 110 y 120 kg de nitrógeno (sumando el nitrógeno en el suelo a la siembra hasta 60 cm de profundidad más el aportado por el fertilizante). Los requerimientos para alcanzar el máximo rendimiento parecen ser algo inferiores a los del trigo. Si sólo estamos pensando en producir cebada forrajera, podríamos seguir este criterio”, señaló Prystupa.
La nueva enfermedad que aqueja a la cebada
El fitopatólogo de la Facultad de Agronomía de Buenos Aires, Marcelo Carmona, las Ing. Agrónomas, Maria Mercedes Scandiani y Norma Formento junto a Alicia Luque del Centro de Referencia de Micología (CEREMIC) realizaron un informe sobre las epidemias de Ramularia collo-cygni, organismo causal del salpicado necrótico de la cebada para la campaña 2012-2013.
Esta enfermedad causa lesiones pequeñas necróticas que ocurren salpicadamente sobre las hojas, que terminan secándose en forma rápida. Al comienzo las lesiones son pequeñas y muy separadas una de otras; miden entre 1 y 3 mm de largo por 0.5 mm de ancho. Inicialmente, estas lesiones pueden confundirse con el comienzo de la mancha en red, luego crecen y se esparcen por toda la hoja dando un aspecto de salpicado denso. Las lesiones aparecen súbitamente y frecuentemente luego de la espigazón y la hoja bandera suele estar totalmente necrosada mostrando un intenso salpicado necrótico.
Los daños que provoca esta enfermedad es la que acelera la senescencia y afecta el número, peso y tamaño de los granos de cebada.
