Impulsados por el veto presidencial a la ley que eliminaba retenciones a las exportaciones a productores el sur bonaerense, la Mesa de Enlace está analizando lanzar un nuevo lock out patronal para la primera semana de septiembre, que consistirá en un cese de comercialización de productos agropecuarios.

Antes de ingresar a la reunión que se realizá en al sede de Coninagro, el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA) declaró que es "perfectamente razonable" que los productores ya estén cortando rutas en el interior, en repudio al gobierno del matrimonio Kirchner.

Por su parte, el vicepresidente de la Federación Agraria Argentina, Pablo Orsolini, argumentó que "el Gobierno nos está llevando a un callejón que no será otro que la protesta".

"Venimos contenidos y queremos evitar la confrontación, pero no encontramos respuestas", dijo el diputado electo por el socialismo chaqueño.

Más temprano, Eduardo Buzzi había anticipado que en la reunión de esta tarde de la Mesa de Enlace se resolverá "un paro de producción y comercialización" en el campo para "los primeros días de setiembre" y "una gran movilización al Congreso" el 10 del mismo mes.

En ese sentido, el dirigente rural advirtió que "la reacción de la gente va a ser muy fuerte en distintas partes del país" y trazó un paralelo con el reclamo que desataron las retenciones móviles.

En tanto, Buzzi sostuvo que "la combinación del veto sumado a la idea de un aumento semejante a las retenciones es un cóctel inmanejable. Pensar que, después del año flaco que tuvimos, el Estado podría quedarse casi con la mitad de la producción es un disparate. Si esto avanzara, la reacción de la gente va a ser muy fuerte en distintas partes del país".