En el Frente para la Victoria hay cierto pesimismo, cuando no abierto fastidio: las encuestas pronostican derrotas contundentes en algunas regiones para la elección de legisladores provinciales. El saldo total bonaerense no es optimista.
Néstor Kirchner anticipa su lanzamiento: ocurrirá el próximo viernes 14, en el teatro Argentino de La Plata. En las próximas horas, Kirchner iniciará una maratón de entrevistas: canal de aire (buscan Telefe), otro de cable (quieren TN) y al menos un diario (Clarín es la meta). ¿Le será tan sencillo programar esas apariciones? Hace tiempo que él no concede entrevistas, y la última conferencia de prensa fue hace casi 1 año, durante el conflicto con el campo.
Kirchner y el gobernador Daniel Scioli estrenarán en Berazategui una nueva modalidad de campaña: caminatas y visitas a fábricas y comercios para mantener contacto con el ciudadano común.
Kirchner espera que 30 intendentes asuman las candidaturas testimoniales. Daniel Scioli ha prometido que, pese a las versiones, el platense Pablo Bruera y el bahiense Cristian Breitenstein se sumarán a la propuesta. Falta convencer a Gustavo Pulti, de Mar del Plata, de un partido vecinal, quien por estos días demanda ayuda a todos por la falta de agua en la ciudad-balneario.
Igual no habrá lugar para todos y sobrarán ofendidos y humillados el sábado 09/04, plazo último para presentar listas. Ya se quejaron Luis DElía y Aldo Rico. La lista principal arrancaría así:
> Néstor Kirchner,
> Daniel Scioli,
> Nacha Guevara,
> Sergio Massa,
> Antonio Caló (de la UOM);
> Cristina Álvarez Rodríguez (ministra de Infraestructura provincial),
> Héctor Recalde (asesor legal de la CGT y diputado que busca su reelección),
> Edgardo Depetris (por las organizaciones sociales, es otro diputado que busca reelección), y
> Diana Conti (extrapartidaria, por los transversales, otra diputada que busca reelección).
Aqui algunos recortes:
Marisa Álvarez en el diario El Día, de La Plata
"(...) Los sondeos son tan concluyentes que en la Gobernación ya dan por perdidas las mayorías en la Legislatura, aunque siempre haya quienes esperan un milagro. Una aceptación dolorosa, en la medida que el gobernador Scioli inició la campaña en apoyo a su propia candidatura "testimonial" a diputado nacional fundándola en el objetivo capital de mantener esas mayorías "para garantizar la sanción de leyes especiales que exigirá -según sus palabras- la crisis global"; objetivo que vinculó entonces con la "gobernabilidad".
Con todo, cerca de Scioli ya trabajan para reponerse de ese golpe. Dicen que "la capacidad de diálogo y la vocación por el consenso" del Gobernador "le permitirán sortear la dificultad" de llevar adelante dos años más de mandato con la Legislatura dominada por la oposición. Ahora el objetivo capital es el triunfo de la lista en la que secundará a Néstor Kirchner.
Por eso, la estrategia de que los intendentes y dirigentes con peso territorial encabecen, con candidaturas "testimoniales", nóminas a legisladores provinciales o a concejales, no sólo no cede sino que se ha profundizado, con Kirchner y Scioli a cargo de la tarea de "persuasión personalizada" sobre algunos jefes comunales.
Es que, a casi un mes de lanzada la consigna y a seis días del cierre de las listas, los intendentes no asumieron una postura en bloque, ni siquiera en el Conurbano, donde al principio se escucharon algunas eufóricas postulaciones "testimoniales".
El último informe reservado de situación, que circula entre los propios jefes comunales, dice que, sobre la treintena de intendentes de la región que concentra a más del 70% del electorado bonaerense, una decena no prestará sus nombres para las listas de concejales. Y entre los considerados alineados con la estrategia habría sorpresas: Raúl Othacehé (Merlo), Mario Ishii (José C. Paz) y Hugo Curto (Tres de Febrero) ubicarían, en realidad, a sus esposas al frente de esas nóminas.
En el interior, -conflicto del gobierno nacional con el campo de por medio-, no pasaría de una docena la cantidad de intendentes que asumirán candidaturas "menores" -"testimoniales" o reales- y Kirchner y Scioli prácticamente han desistido de convencer al resto.
Con una excepción: se preanuncian derrotas tan catastróficas en las secciones electorales Quinta y Sexta -con epicentros en Mar del Plata y Bahía Blanca respectivamente- que los intendentes de esas dos ciudades, el vecinalista Gustavo Pulti y el peronista Cristian Breitenstein, se han convertido en el eje de todos los "esfuerzos" del oficialismo para convencerlos de que sean candidatos "testimoniales" a legisladores provinciales por esas secciones.
En la Quinta Sección, donde se ponen en juego cinco bancas del Senado bonaerense, el oficialismo está tercero según todas las encuestas, sin llegar al piso necesario para conseguir representación.
Y en la Sexta, donde se eligen 11 diputados, también se ubica en tercer lugar y obtendría apenas un par de escaños. Las presiones sobre Pulti y Breitenstein, que tienen muy alta imagen positiva en sus comunidades, entonces, se vinculan con mejorar esas chances -aunque sin ilusiones de cambiar la historia- y, sobre todo, con generar una tracción de votos extra hacia la lista que encabezarán Kirchner -con una intención de voto de un dígito en esas dos ciudades- y Scioli.
Pero Breitenstein y Pulti ya tomaron idéntica y definitiva decisión. No serán candidatos. Se dicen convencidos de que sus postulaciones significarían inútiles inmolaciones políticas, porque no modificarían en nada la situación ya dada y podrían aún agravarla, desde que casi el 90% de sus comunidades rechaza las candidaturas testimoniales. (...)".
Joaquín Morales Solá en el diario La Nación
"¿Qué tragedia podría ocurrir el 28 de junio? Lo peor que le puede pasar a Kirchner en las próximas elecciones legislativas es la derrota o que deba digerir la pérdida, casi inexorable ya, de las mayorías en las dos cámaras del Congreso. Nada que cualquier democracia no haya vivido.
Dos encuestas bonaerenses recientes le han llevado malas noticias a Olivos. Los lanzamientos de candidatos podrían hacerse en los próximos días para adelantar los tiempos. Pero ¿qué es la derrota si no lo único ineludible de la política?
El problema consiste en que Kirchner no está acostumbrado a negociar, a tal punto que declaró la inexistencia de sus gabinetes, incluido el actual. ¿Dónde está el gobierno de Cristina Kirchner? ¿Dónde están sus ministros? ¿Qué se sabe del jefe de Gabinete, Sergio Massa, salvo que anda rumiando sus broncas contra Kirchner y sus políticas?
El poder de un solo hombre es incompatible con la democracia. Hace poco, en Washington, el flamante presidente Barack Obama debió vérselas con el Congreso: negoció, concedió y cambió su paquete de medidas para enfrentar la más grave crisis económica desde 1929. Era la condición para que los congresistas le aprobaran el trazo grueso de su propuesta. El simpático presidente se rindió ante esa relación de fuerzas parlamentaria. Nadie esperaba otra cosa de él.
Es probable que Kirchner no quiera vivir una vida que nunca ha vivido. Sólo imaginar que deberá aceptar las decisiones contrarias del Parlamento, mientras vea crecer, impotente, los liderazgos que lo sucederán, es para él mucho peor que una larga pesadilla. Por eso se aferra desesperadamente a las garras del poder.
No hace mucho, en una de esas tertulias interminables de Olivos, rodeado de amigotes que lo adulaban, uno de éstos le preguntó por qué pensaba en Daniel Scioli como eventual presidente si él no pudiera volver a la Casa Rosada. ¿Y qué te parece si yo fuera entonces el gobernador de Buenos Aires? Los intendentes me apoyarán. ¿Quién tendría el poder? ¿Scioli o yo? , dijo, y provocó el silencio de la sorpresa. Más de 150 años después, algún sector de la dirigencia argentina supone que se puede resucitar a Juan Manuel de Rosas. (...)".
Eduardo van der Kooy en el diario Clarín
"(...) Las buenas noticias que son posibles rescatar en una realidad desangelada muchas veces, al final, tampoco lo son. Los términos del intercambio comercial mejoraron para la Argentina en las últimas semanas por la suba del precio internacional de la soja. Pero esa suba está fomentada por una menor oferta derivada, en especial, de la magra cosecha en nuestro país a raíz del conflicto con el campo.
La desconfianza también va produciendo una paulatina dolarización de las carteras bancarias. Pero, a diferencia de otros tiempos difíciles, el dinero no está saliendo de allí. El desbarajuste financiero internacional que terminó detonando la crisis económica pareciera un motivo para explicar el comportamiento.
Esa realidad aparece prendida con alfileres y su evolución depende, en parte, de la campaña en marcha y, mucho, de la reacción que los Kirchner y la oposición tengan el día después del comicio.
El ex presidente sintió la semana pasada algún alivio cuando Daniel Scioli le comunicó que una encuesta propia les concedía en Buenos Aires entre 5 y 9 puntos de ventaja. Otros trabajos reflejarían una mayor paridad con el PJ disidente de Francisco De Narváez y Felipe Solá. Con su crecimiento paulatino la alianza entre la Coalición Cívica y el radicalismo pretende terciar.
Los intendentes bonaerenses que se han montado en las candidaturas testimoniales no recogen todavía sobre el terreno el optimismo y la holgura que muestran algunas de aquellas encuestas.
Los Kirchner se han colocado en la última semana, con sus declaraciones, metas electorales complicadas de cumplir. No sólo van por una victoria en Buenos Aires que, siquiera por poco, es factible. Claman también por una mayoría parlamentaria que, como están las cosas, les resultaría casi imposible mantener.
Sólo en Buenos Aires renovará 20 bancas y aún ganando resignaría no menos de 7. El panorama aparece desolador en Santa Fe, Capital y Córdoba. (...)".
Raúl Kollmann consultó, para Página/12, a Enrique Zuleta Puceiro, de Opinión Pública, Servicios y Mercados, Hugo Haime, de Haime y Asociados, Sergio Berenztein, de Poliarquía; Analía del Franco, de Analogías, Ricardo Rouvier de Rouvier y Asociados y Roberto Bacman, del Centro de Opinión Pública (CEOP)
"(...) -¿Cuál es su pronóstico para la provincia de Buenos Aires?
> Del Franco: –El oficialismo está liderando la contienda, pero será una contienda dura y complicada. Conviven dos realidades: la tradición oficialista peronista y los resabios del conflicto con el campo. La incorporación de los intendentes oficialistas a la campaña y a la defensa del proyecto kirchnerista le da aire a la lista K. Si bien las candidaturas testimoniales se instalaron con dudas en la opinión pública, el apoyo de este electorado a sus intendentes bien conceptuados pesa y da garantía de voto. Así logran reforzar al proyecto kirchnerista.
> Zuleta: –Hoy Kirchner tiene una ventaja de diez puntos. Es una elección de tres tercios –el kirchnerismo, el peronismo no kirchnerista y el no peronismo–, pero con esa ventaja para el ex presidente. Según nuestros datos, hoy De Narváez empata con Stolbizer el segundo lugar. La tendencia viene desde enero. No veo votantes indecisos o vacilantes.
> Bacman: –Hasta el momento el Frente para la Victoria es la opción más votada. La intención de voto promedia entre 33 y 34 por ciento, con 6 o 7 puntos de diferencia con su inmediato perseguidor. Todo parece indicar que nace de un piso firme, sin que hasta el momento se observen indicadores de volatilidad. Hay una influencia electoral de los intendentes, en especial en el Gran Buenos Aires. El frente denominado Unión-PRO en la última encuesta se ubica en el eje del 26 al 27 por ciento de intención de voto. El Acuerdo Cívico y Social (la Coalición Cívica y la UCR) ha mejorado notablemente y se ubica alrededor del 20 por ciento de intención de voto. Es cierto que el fallecimiento de Raúl Alfonsín ha impactado a la opinión pública, pero en política no existen milagros sino factores que –a veces, no siempre– pueden llegar a influir en el electorado. Queda alrededor de un 15 por ciento entre indecisos y votos negativos. Si las tendencias detectadas hasta el momento se mantienen, la diferencia a favor del FpV podría ampliarse.
> Berenztein: –Los datos existentes hasta el momento sugieren que será una elección muy pareja entre el oficialismo y el peronismo disidente, que entre los dos pueden llegar a obtener entre el 60 y el 65 por ciento de los votos. El Acuerdo entre la CC y la UCR está a una distancia importante, aunque no imposible de remontar. Sus chances se reducen si se instala la idea del “voto útil anti K”, que favorecería a De Narváez.
> Rouvier: –El oficialismo está ganando la elección. La estrategia de incluir a los intendentes trajo ganancias en el conurbano, pero la situación en el interior de la provincia es débil. La complejidad que tiene el distrito obliga a ser muy prudente con las estimaciones. El escenario está con mucho dinamismo.
> Haime: –La situación en la provincia de Buenos Aires es muy dinámica. Carezco en este momento de datos propios actualizados del interior de la provincia para el análisis pormenorizado y mucho menos para una proyección definitiva global. Si analizamos los resultados de 2007, vemos que entre el oficialismo y el peronismo disidente hubo y hay cerca de 70 puntos en disputa. Para que el oficialismo pierda, debería ubicarse por debajo de los 35 puntos, lo que supone una merma en relación a la elección a gobernador de 15 puntos y esto parece mucho. No creo que suceda. (...)".
Gabriela Granata y Diego Schurman entrevistaron a Daniel Scioli para el diario Crítica de la Argentina
"(...) “En motonáutica mi objetivo era ganar el campeonato. ¿Con quién corría? Con el italiano Fabio Buzzi. ¿Por qué? Porque era el dueño del astillero que fabricaba los motores y las lanchas. Kirchner es el presidente del PJ, el que puede garantizar a la provincia de Buenos Aires los apoyos que el Gobierno necesita”.
–Entonces ya está decidida la fórmula Kirchner-Scioli.
–(Se ríe). Y… vamos en camino. La lista será fruto de un trabajo articulado entre Nación, provincia y municipios, porque cuando perdió la provincia, perdió el país.
–¿Para eso es necesario que Kirchner esté al tope de la lista?
–Que Kirchner encabece la lista es una garantía. Garantiza que la provincia tenga los apoyos que necesita. Fue un presidente que le ha prestado particular atención y que conoce a fondo la provincia. Y por eso la posibilidad de que vuelque su experiencia y encabece la propuesta electoral en la que yo me pongo al frente para defender también a Buenos Aires, y que siga avanzando.
–¿Se lo imagina a Kirchner sentado en una banca de diputado o lo de él será una candidatura testimonial?
–En la casa de la democracia, que esté la posibilidad de tener a un hombre que ha gobernado la Argentina durante cinco años y es presidente del partido me parece interesante. Kirchner da el debate, tiene iniciativa. Y tiene muy claro que si la provincia está con problemas, lastima a toda la Argentina, porque es el 40 por ciento del PBI y de la población.
–¿Cuándo se anuncia oficialmente la lista?
–A fines de la semana próxima (por esta semana).
–¿Comparte el discurso de Néstor y Cristina Kirchner acerca de que si no gana el oficialismo vuelve 2001?
–No es como algunos dicen, que se trata de instalar el miedo, sino de crear conciencia. No es apelar al miedo, de ninguna manera. Somos el fruto de la voluntad popular y nos sometemos a la voluntad popular cava vez que hay una cuestión de fondo en la Argentina. Y nuestra voluntad es seguir adelante con lo que está en marcha. Yo prometí y lo hice: cambié las leyes de Justicia, modifiqué los planes sociales, amplié la red de agua potable y cloacas…
–¿No son irregulares las candidaturas testimoniales?
–Son un pronunciamiento político de compromiso y de responsabilidad porque no es una elección legislativa más. Lo mismo hizo Mauricio Macri en la Ciudad de Buenos Aires cuando anticipó la elección y puso a su vicejefa, Gabriela Michetti, de candidata. Insisto, la de junio no es una elección más. Y la mayoría de los intendentes, que conocen los problemas de sus vecinos, están dispuestos a ponerse al frente y defender a su comunidad.
–Así las cosas, ¿no debería ser candidata también Cristina?
–No hace falta. Ella es la Presidenta y aquí hay un ex presidente que es también presidente del PJ que conoce como pocos la provincia de Buenos Aires, y yo soy el gobernador que quiere defender su provincia. Y la manera de defenderla a ella es que tengamos respaldo en las urnas.
–¿Siente la presión de que si no juega su candidatura parece que está sacando los pies del plato?
–No, yo por lo único que me siento presionado es por las demandas de la gente. No se puede desconocer que este modelo es el que nos sacó de la crisis contra otro modelo que nos metió en la crisis; uno que dinamiza el mercado interno contra otro que buscaba la retracción para que le cierren las cuentas fiscales; uno que les aumentó a los jubilados contra otro que propuso un ajuste; uno de dinamiza la obra pública contra otro en la Ciudad que detuvo las obras en medio de la crisis.
(...) –Pero si Reutemann gana en Santa Fe, ¿gana Kirchner, el antikirchnerismo o el poskirchnerismo?
–Gana el peronismo. Reutemann dice que es peronista. No es lo mismo el caso de Felipe Solá, que tomó una posición distinta y se fue a una alianza con Macri. Reutemann, en cambio, descartó una alianza con el PRO.
–Pero Reutemann es un peronista disidente.
–No es así. El propio partido decidió la libertad de acción y Reutemann dice que en algunas cosas está a favor del Gobierno. Yo espero que junto a Córdoba ayuden a la Presidenta.
–¿Coincide con la idea de que la supervivencia del kirchnerismo depende del resultado en la provincia de Buenos Aires?
–Yo pienso en el país. No en términos de kirchnerista o no kirchnerista. ¿Cómo busco lo mejor para mi provincia y la gente? Defendiendo a mi provincia. Qué mayor garantía y tranquilidad puede tener un intendente que el gobernador se ponga al frente de defender la provincia y el presidente del partido también esté dispuesto a jugársela por la provincia después de lo que demostró y lo que hizo. Y si realmente quieren un cambio de fondo será en 2011.
(...) –Usted mencionó a Solá, ex gobernador de la provincia. ¿Cómo lo ve?
–Realmente incómodo, porque no le gusta estar segundo. Como si no hubiera confianza con De Narváez, uno no ve que estén compartiendo, que estén juntos en la campaña. Encima dice que renuncia a su banca el 9 de mayo, cuando cierren la lista. ¿Será que demora la decisión para ver si se pelea antes con De Narváez y queda afuera? (...)".


