Según manifestó a El Cronista el presidente de la Cámara de Engordadores de Hacienda Vacuna (Caehv), Juan Eiras, “la medida es nefasta porque cambia las reglas de juego de un día para el otro”.

El representante de los feedlots señaló que la decisión “va en contra de todo lo que se hizo” y que no hace más que destruir el poder de compra del establecimiento al productor.

“Lo único que hace esta medida es contribuir al faltante de carne que se generará en los próximos meses”, aseguró Eiras.

El malestar del sector radica en que con esta definición, los productores podrán vender la hacienda con un quilaje menor, lo que incidirá negativamente en los valores del novillo gordo.

A eso se suma que los consumidores locales prefieren la terneza del animal chico, hoy el costo de engordarlo no es compensado luego con el precio de la hacienda final.

Pero Eiras explicó que esta medida terminará perjudicando al productor, ya que la caída del valor de la hacienda gorda que los feedlots tienen en sus corrales se trasladará en una menor capacidad de compra del animal.

El Federal