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Con las vacas flacas a ambos lados de la frontera, las exportaciones argentinas a Brasil se derrumbarán este año. Pero aun así, y a causa de que la baja de la importaciones también será pronunciada, el déficit comercial con ese país se reducirá. Así, las disputas comerciales tendrán que resolverse en un escenario de restricción de la demanda.


Los economistas pronostican que las exportaciones argentinas caerán este año entre 10 y 30% respecto de los niveles de 2008. Ese escenario afectará especialmente la relación con Brasil, el principal socio comercial de nuestro país. "En los últimos dos meses hubo un cambio drástico de escenario. Los dos mercados se achican y lo mismo ocurre con el resto del mundo. Y esto va a reducir el déficit comercial", señala Horacio Lazarte, de Abeceb.com.


El año pasado, el déficit comercial con Brasil alcanzó un rojo de US$ 4.344 millones, con un crecimiento del 8,4% respecto al saldo acumulado en el 2007. Hasta septiembre pasado se esperaba que ese rojo se incrementara aún más en 2009. Pero ahora comienza a abrirse otro escenario.


Brasil absorbe el 30% de las exportaciones argentinas. "El 70% de lo que se exporta se concentra en tres rubros: autos, combustibles y cereales. Y está claro que este año, las exportaciones van a sufrir por dos frentes: la baja de los precios y la de las cantidades", dice Lazarte.En las importaciones el efecto no será tan drástico "porque las compras hacia Brasil están más diversificadas que las exportaciones".


Para Marina Dal Poggetto, del Estudio Bein, el comercio bilateral se verá más afectado por el freno en la demanda en las economías de ambos países que por las diferencias en el tipo de cambio. Mientras tras la crisis, Brasil devaluó el real 50%, Argentina apenas reacomodó el peso un 15%.


"En el corto plazo, el comercio va a depender más del "efecto ingreso" en los dos países que del tipo de cambio", razona Dal Poggetto. Para ejemplificar que un real en baja no implica necesariamente una invasión de productos brasileños, Dal Poggetto recuerda que durante la convertibilidad, con el peso sobrevaluado, Argentina era superavitaria con Brasil.


En el último mes del año 2008, el déficit comercial con Brasil mostró el valor más bajo desde principios de 2004 llegando a 64 millones de dólares, con una caída de casi un 70% respecto a diciembre de 2007. En este resultado tuvo mucho que ver el derrumbe de las importaciones, que cayeron 25,3% respecto de igual mes del año pasado. Abeceb resalta que "no se producía una caída semejante en las importaciones desde noviembre de 2002, cuando todavía no se salía de la profunda crisis local".