PEKIN.- La Unión Europea y Asia quieren actuar de forma rápida y conjunta contra la crisis financiera mundial, según manifestaron hoy los representantes del bloque de los 27 Estados de la UE y de las 16 naciones asiáticas que acudieron a la mayor cumbre UE-Asia (ASEM) celebrada durante dos días en Pekín.
La canciller alemana Angela Merkel pidió hoy en Pekín una reforma rápida del sistema financiero para atajar la crisis bancaria mundial. La mandataria abogó por presentar un plan de trabajo en la cumbre que se llevará a cabo a mediados de noviembre en Washington.
"Debemos acordar un mandato por el cual se puedan realizar las negociaciones sobre una reforma del mercado financiero, lo que realmente nos conduzca a una verdadera constitución financiera de alcance mundial", explicó Merkel.
La política conservadora subrayó: "Sólo así podemos impedir que se vuelva a repetir una crisis como esta". En su opinión es necesaria una institución que se ocupe de forma más intensa del control de los mercados financieros.
En la cumbre ha quedado claro que los fondos monetarios internacionales deben asumir más responsabilidades. Además, continuó Merkel, se precisan reglas claras para los productos financieros. Los 43 países que asisten a la ASEM han saludado la celebración de una cumbre financiera en Washington.
"Me place confirmar que compartimos la determinación y el empeño de Europa y Asia para trabajar juntos´´, dijo el presidente de la Comisión Europea, el portugués José Barroso.
Debatir la crisis. Al término de la cumbre, que si bien se planeó para tratar el cambio climático estuvo dominada por la crisis financiera, el presidente de ASEM y jefe de gobierno de China, Wen Jiabao, sostuvo que la comunidad internacional debe aclarar las responsabilidades que caben a gobiernos, compañías y reguladores de los mercados financieros en la crisis.
"Hemos reafirmado que hay que tomar medidas rápidas para impulsar el crecimiento económico en todo el mundo, y en especial los países desarrollados deben tomar medidas para estabilizar sus mercados financieros", agregó, para luego asegurar que China tendrá un papel constructivo en la cumbre financiera de Washington.
El sultán de Brunei, Hassanal Bolkiah, habló en representación de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN) y opinó que la crisis financiera hizo de la cumbre de este año "el más importante de los encuentros ASEM que se haya celebrado".
Presión de España. El mandatario español, José Luis Rodriguez Zapatero, manifestó que España debe asistir a la cumbre financiera de Washington "sea cual sea el formato" de su presencia, y su confianza en "las gestiones que instituciones europeas llevan a cabo con ese fin". Según Zapatero, España tiene algo que aprotar como país "serio" que "ha demostrado tener un sistema financiero serio".
La relación particular de su gobierno con el actual presidente de Estados Unidos, George W. Bush, no tiene relación con que España no esté invitada a la cumbre, opinó el español. "Amistades mayores" hubo entre la administración Bush y el gobierno de José María Aznar y eso no le sirvió a España para entrar en el G8 ni en el G20, argumentó.
Zapatero manifestó también su convicción de que la economía de España volverá a crecer en cuanto cambien las condiciones internacionales, y agregó que en las actuales circunstancias "la respuesta" está en "el diálogo social".
Los representantes de los 27 países de la UE y de las 16 naciones asiáticas se mostraron de acuerdo en que hay que realizar profundas reformas en el sistema financiero. "Aunque las reformas estructurales y las políticas económicas sólidas aumentaron las resistencias tanto de Europa como de Asia, ambas regiones sufren las consecuencias del empeoramiento del clima global", sostienen en una declaración conjunta.
Agencias AFP, AP y DPA


