La noticia del traspaso del sistema previsional de las AFJP al Estado nacional sigue pegando duro en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires. Al igual que ayer, todo cae: las acciones líderes y los bonos de la deuda pública argentina. Estos últimos representan el 55% de las inversión de las administradoras de jubilaciones privadas.

El índice Merval cae más de 17 por ciento y perfora la barrera de los 1.000 puntos; tendencia que se acentúa con el paso de los minutos.

El riesgo país, un indicador que mide la diferencia de rendimiento entre los bonos del Tesoro norteamericano y los de los países emergentes, se dispara sobre los 1.900 puntos. Es decir, se los argentinos son cada minuto menos atractivos para los inversores.

Los inversores se siguen desprendiendo de los títulos de la deuda argentina y provocan bajas generalizadas en los precios. El Boden 2012 cotizaba con una baja de 12,61 por ciento; el Boden 2013, de 8; el Bogar 2018, de 11,49; y el Boden 2015, de 9,52.

Entretanto, el dólar minorista permaneció a 3,21 pesos para la compra y 3,24 para la venta, pero en la franja mayorista la divisa terminó ligeramente hacia arriba a 3,225 pesos, frente a los 3,2125 que se pagaron ayer.

Según los operadores, el Banco Central participó desde temprano con ventas muy puntuales para desactivar la presión sobre el mercado cambiario.

MERCADOS INTERNACIONALES. La operatoria a nivel mundial no discurre mucho mejor. La eliminación del sistema privado de jubilaciones tuvo su primera consecuencia en España. La Bolsa española se derrumbaba 8% por la incertidumbre que genera en los empresarios europeos el proyecto de ley enviado por Cristina Kirchner al Congreso.

Poco después del mediodía, el índice madrileño IBEX-35 cayó más de 5 por ciento, por debajo de la frontera de los 1.000 enteros. Según el diario El Mundo el proyecto de ley firmado por la Presidenta para reestatizar el sistema de jubilaciones en manos de las AFJP aporta “incertidumbre a los negocios de los grandes pesos pesados españoles, como Santander, Telefónica, Repsol o BBVA, en el país”.

En Nueva York, los indicadores de Wall Street operaban con signo negativo, y así el industrial Dow Jones bajaba 3,15 por ciento; el tecnológico Nasdaq, 1,84; y el financiero S&P500, 3,15.

La Bolsa de San Pablo negocia con una fuerte tendencia negativa por el temor de los inversores a los efectos de la crisis financiera sobre la economía tras la decisión del Gobierno de autorizar a los bancos estatales a comprar participación en instituciones financieras privadas. El índice Bovespa perdía el 5% y caía hasta los 37.200 puntos, mientras que el real cedía terreno nuevamente frente al dólar.

En el resto de los recintos bursátiles del Viejo Continente también se registran pérdidas. El FTSE100 de Londres desciende 4,1%; el CAC 40 de París, 4,3%, y en Frankfurt el DAX cae 4,6 por ciento.

Previamente, las bolsas asiáticas marcaron fuertes bajas en sus cotizaciones, en un recrudecimiento de la crisis financiera global tras difundirse las pérdidas de importantes grupos empresarios.

Tokio se desplomó 6,79 por ciento, Hong Kong 5,15, Shanghai 3,20, Taiwán 1,62, Tailandia 3,03, India 3,48 y Seúl 5,14, según la agencia de noticias Bloomberg.