La Argentina, como reflejo de una realidad socioeconómica concreta, presenta una fuerte disparidad en lo que el Banco Central define como "recursos crediticios bancarios", a pesar del fuerte, y sostenido, incremento en el otorgamiento global de préstamos. Y lo mismo, pero más agravado todavía, sucede con la distribución geográfica de los cajeros automáticos, donde se verifica una concentración extrema de terminales. Lo paradójico es que, en realidad, el interior demuestra actualmente un dinamismo económico que lo haría "acreedor" a una mayor atención y dedicación por parte de las entidades financieras.
En términos regionales, dice el Informe sobre Bancos del Banco Central, "la Argentina presenta una considerable disparidad de disponibilidad de recursos crediticios bancarios", un eufemismo técnico para definir una marcada asimetría en el otorgamiento de préstamos (medido en pesos por habitante) al sector privado. La propia entidad monetaria sostiene que "si se deja a un lado la jurisdicción con más créditos provenientes del sistema financiero, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con 19.600 pesos por habitante, se sigue observando una elevada desigualdad".
Así, por caso, "Tierra del Fuego, Chubut, La Pampa y Neuquén (las cuatro jurisdicciones que siguen en función de sus financiaciones por habitante), quintuplican en promedio los recursos disponibles por las cuatro provincias menos favorecidas (Formosa, Corrientes, Santiago del Estero y Catamarca)".
Sin embargo, el BCRA advierte que "no obstante esta situación, se observa una expansión generalizada del crédito al sector privado en todas las provincias". En el último año, 15 jurisdicciones evidenciaron tasas de crecimiento interanual del crédito al sector privado que superaron significativamente el promedio del país (40%). Estas presentaban una moderada ponderación en el crédito total al sector privado a nivel nacional (24,9%) y una alta participación en el total de la población (41,5%), siendo sólo 3 de ellas de alto desarrollo económico y las restantes de niveles medio y bajo.
Por su parte, 6 provincias registraron tasas de crecimiento en línea con el total del país en igual período (48,6% de la población y 21,5% del crédito al sector privado), abarcando la provincia de Buenos Aires y regiones de desarrollo intermedio y bajo. Entre las tres jurisdicciones restantes, con crecimiento menor, se encuentra la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (con 53% del crédito bancario total al sector privado), y dos de bajo desarrollo (Formosa y La Rioja).
Para la autoridad monetaria, "de mantenerse estas tendencias en los próximos años, gradualmente podría evidenciarse una menor disparidad en la disponibilidad de recursos bancarios entre las distintas regiones". Las mejoras, según el BCRA En este marco, según el BCRA, "en los recientes años se verificó una sostenida mejora en la cobertura geográfica de la red de distribución de servicios financieros en las distintas jurisdicciones, en línea con la robusta expansión de la actividad productiva en todas las regiones del país".
Y dice que "la cantidad de habitantes por cajero automático observó un paulatino progreso relativo en las zonas de menor disponibilidad de servicios financieros (principalmente del NEA y del NOA). En este contexto, las provincias del norte argentino aún presentan el menor alcance en términos de sucursales (10% del total). Sin embargo, cabe señalar que más de dos terceras partes de la población del país evidencia una considerable densidad relativa de sucursales bancarias".
Claro que a marzo de 2008, había 9.261 cajeros automáticos en el país. Y de este total, por ejemplo, 2.124 están instalados en la Capital Federal, mientras que en toda la provincia de Córdoba hay 648; en Santa Fe, 716, y en La Rioja, escasos 38.
En términos regionales, dice el Informe sobre Bancos del Banco Central, "la Argentina presenta una considerable disparidad de disponibilidad de recursos crediticios bancarios", un eufemismo técnico para definir una marcada asimetría en el otorgamiento de préstamos (medido en pesos por habitante) al sector privado. La propia entidad monetaria sostiene que "si se deja a un lado la jurisdicción con más créditos provenientes del sistema financiero, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con 19.600 pesos por habitante, se sigue observando una elevada desigualdad".
Así, por caso, "Tierra del Fuego, Chubut, La Pampa y Neuquén (las cuatro jurisdicciones que siguen en función de sus financiaciones por habitante), quintuplican en promedio los recursos disponibles por las cuatro provincias menos favorecidas (Formosa, Corrientes, Santiago del Estero y Catamarca)".
Sin embargo, el BCRA advierte que "no obstante esta situación, se observa una expansión generalizada del crédito al sector privado en todas las provincias". En el último año, 15 jurisdicciones evidenciaron tasas de crecimiento interanual del crédito al sector privado que superaron significativamente el promedio del país (40%). Estas presentaban una moderada ponderación en el crédito total al sector privado a nivel nacional (24,9%) y una alta participación en el total de la población (41,5%), siendo sólo 3 de ellas de alto desarrollo económico y las restantes de niveles medio y bajo.
Por su parte, 6 provincias registraron tasas de crecimiento en línea con el total del país en igual período (48,6% de la población y 21,5% del crédito al sector privado), abarcando la provincia de Buenos Aires y regiones de desarrollo intermedio y bajo. Entre las tres jurisdicciones restantes, con crecimiento menor, se encuentra la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (con 53% del crédito bancario total al sector privado), y dos de bajo desarrollo (Formosa y La Rioja).
Para la autoridad monetaria, "de mantenerse estas tendencias en los próximos años, gradualmente podría evidenciarse una menor disparidad en la disponibilidad de recursos bancarios entre las distintas regiones". Las mejoras, según el BCRA En este marco, según el BCRA, "en los recientes años se verificó una sostenida mejora en la cobertura geográfica de la red de distribución de servicios financieros en las distintas jurisdicciones, en línea con la robusta expansión de la actividad productiva en todas las regiones del país".
Y dice que "la cantidad de habitantes por cajero automático observó un paulatino progreso relativo en las zonas de menor disponibilidad de servicios financieros (principalmente del NEA y del NOA). En este contexto, las provincias del norte argentino aún presentan el menor alcance en términos de sucursales (10% del total). Sin embargo, cabe señalar que más de dos terceras partes de la población del país evidencia una considerable densidad relativa de sucursales bancarias".
Claro que a marzo de 2008, había 9.261 cajeros automáticos en el país. Y de este total, por ejemplo, 2.124 están instalados en la Capital Federal, mientras que en toda la provincia de Córdoba hay 648; en Santa Fe, 716, y en La Rioja, escasos 38.


