Si para el jueves no hay respuestas, iniciarán un paro de actividades que podría resentir el abastecimiento de carne en los comercios de la zona.

El Sindicato de la Carne realizó el viernes a la noche una asamblea en la capital provincial para decidir las medidas de acción.
Allí surgió la resolución de trabajar estrictamente a reglamento en los frigoríficos La Esperanza de General Ramírez, Merco Meat de María Grande, Alberdi (ruta 11), Angus de Paraná y la Cooperativa de Carniceros.
Uno de los efectos que genera la tarea “a reglamento” es el cumplimiento de las ocho horas de jornada laboral. En algunos frigoríficos, que habitualmente no exigen a sus empleados trabajar más de esa carga horaria, la medida de fuerza no tendrá consecuencias; pero sí tendrá impacto en la producción de aquellos que requieren más tiempo de labor del personal. Este es el caso del frigorífico Alberdi, según señaló a la prensa el secretario general del sindicato, Ramón Vázquez.
Los gremialistas pusieron plazo hasta el jueves para que los empresarios atiendan los reclamos de aumento salarial. Si eso no sucede, en una nueva asamblea, decidirían ir directamente al paro.
“Por ahora estas medidas no van a repercutir en el abastecimiento de carne a los comercios, pero si seguimos sin respuestas se van a profundizar las protestas y en algún momento sí se va a sentir”, aseguró Vázquez.
El viernes a la noche el gremio se declaró en estado de alerta y movilización, y facultó a la Comisión Directiva para realizar todas las acciones que considere necesarias a fin de “reclamar una escala salarial o un aumento para paliar la situación que viven los empleados del sector”, aseguró el dirigente.
“El gran problema es que la industria frigorífica se expande, los mercados internacionales se expanden, pero los salarios siguen siendo de hambre”, agregó.
El sindicalista comentó que actualmente un operario inicial cobra 3 pesos la hora y uno especializado no llega a 4 pesos. En estos montos están incluidos los 100 y 60 pesos agregados a los sueldos por disposición del gobierno nacional. “Un trabajador inicial no llega a los 700 pesos. Nuestros salarios están por debajo de lo que se necesita para vivir”, dijo.
La exigencia es que los sueldos se eleven de manera tal que un operario inicial cobre entre 4,5 y 5 pesos la hora y que uno especializado no baje de los 1.000 pesos por mes.
“Dicen que si nos dan el aumento, eso se trasladará a los precios. Pero no es así: cuando teníamos 2 pesos la hora la pulpa valía 1,60; ahora que tenemos 3 pesos la hora, la pulpa cuesta 9”, apuntó.
Además de los trabajadores de los frigoríficos que estuvieron en la asamblea, esperan expandir las medidas de fuerza a todos los del Departamento Paraná y de otros lugares de la provincia. Asimismo, se proponen realizar una presentación en la Dirección Provincial de Trabajo para intentar instalar una mesa de negociación con los empresarios.