Para establecer la incidencia de la fertilización en la línea se realizó un ensayo preliminar con seis recuentos en el mismo lote, a cargo de los ingenieros agrónomos Mario Bragachini, Andrés Méndez y Fernando Scaramuzza, pertenecientes al proyecto Agricultura de Precisión del INTA Manfredi en Córdoba.


Este ensayo se desarrolló sobre un rastrojo de maíz 12.000 kilogramo por hectáreas de rendimiento, la variedad de trigo utilizada fue Baguette 10, con un poder germinativo del 95 por ciento, el peso de mil granos fue de 35 gramos, la fecha de siembra fue el 15 de mayo de 2002, la densidad de siembra fue de 110 kilogramos por hectárea, lo que resulta en 298 semillas viables por metro cuadrado y el fertilizante utilizado fue FDA, colocado en la línea de siembra en caños separados.


Vale aclarar que los resultados sólo deben ser considerados como tendencia.


Datos de siembra


Los datos a la siembra: la distancia entre hilera: 21 centímetros. Tren de siembra: la cuchilla utilizada fue turbo, doble disco con copiado trasero, rueda tapadora con disco recortado de tapado, colita plástica fijadora de semilla, el distribuidor de fertilizante fue del tipo chevrón. La caída del fertilizante en la línea de siembra en caños individuales.


Los resultados que arrojó la experiencia son los siguientes: Con 0 de fosfato diamónico (DAP), las plantas emergidas (por metro cuadrado) fueron 228,6 y el porcentaje de emergencia del 76,5 por ciento.


Con 70 kilos de DAP, los valores fueron de 225,1 y 75,3 por ciento, respectivamente. Además, los kilos de nitrógeno para cada tratamiento llegó a los 12,6.


Finalmente, para una dosis de 108 DAP, los guarismos fueron de 20,58, 68,9 por ciento y 10,5 kilos de N por cada tratamiento.


En los resultados obtenidos se observa que existe caída de emergencia con el aporte de 70 kilogramos por hectárea de FDA en la línea en trigo sembrado a 21 centímetros entre línea (suelo con buena humedad) y que si bien con 108 kg/ha cae la emergencia en promedio un 7,3 %, estos datos constituyen una alerta para no superar las dosis de N máxima en la línea que estaría en el orden de 15 kg/ha de N (83 kg/ha. DAP) en condiciones de alta humedad de suelo.


Factores a considerar


Como las dosis fitotóxicas para la semilla y plántula no se relacionan con los kg/ha de fertilizante aplicado, si no con la concentración de nitrógeno en la línea de siembra, existen factores a considerar frente a la selección de la dosis máxima a colocar:

• El porcentaje de nitrógeno del fertilizante utilizado, 18 por ciento N, 9 por ciento de N fosfato monoamónico, urea 46 por ciento de nitrógeno.


• La distribución espacial de fertilizante, cuando más distanciadas estén la hileras, más concentración fitotóxica se produce a igual dosis.


• En la medida en que el suelo se encuentre con mayor contenido de humedad y posea mas arcilla, la dosis máxima será mayor, así como también en la medida en que la distribución de fertilizante en la línea sea más uniforme, el riesgo disminuye.


Resultados


Según el ensayo se pueden desprender las siguientes dosis máximas de DAP en kilogramos por hectárea, según los diferentes distanciamientos entre hileras.


Los resultados se hicieron a 17,5 centímetros entre hilera y fueron 100 kilos por hectárea de dosis máxima de DAP. A 10 centímetros: 92, a 21 centímetros:: 83 y a 26 centímetros: 67.


En la medida en que se amplía la distancia entre hilera, la dosis máxima fitotóxica disminuye proporcionalmente.


Esto es consecuencia directa de que con la misma dosis de fertilizante por ha cuando aumentamos la distancia entre hileras, se debe poner más fertilizante en la línea para llegar a esa concentración con la cual aumenta el riesgo de fitotoxicidad.