Un futuro incierto, pero con mucho por hacer
La idea de anticiparse al futuro siempre sedujo a empresarios y gobiernos. Sin embargo —como destaca el informe— la clave no está en adivinarlo, sino en empezar hoy. Inspirados en la frase de Alan Turing, los autores remarcan que fortalecer procesos, invertir a largo plazo, promover talento y mantener eficiencia son acciones que no pueden esperar.
Argentina transita un incipiente cambio de reglas económicas: menos regulaciones, menor intervención estatal, competencia de monedas, ausencia de obra pública y búsqueda de mayor previsibilidad. Todo en un contexto donde cada actor interpreta el futuro según sus heridas, expectativas o escepticismo.
El mundo también atraviesa su propia transición: mayores regulaciones, menor población joven, conflictos bélicos y un avance tecnológico vertiginoso. En ese escenario, los líderes deben decidir aun con incertidumbre, asumiendo flexibilidad y capacidad de corregir errores a tiempo.
La macroeconomía se juega dentro de cada empresa
El sorpresivo giro post electoral dinamizó expectativas: el riesgo país cayó de 1200 a 600 puntos, una señal de mayor confianza y costo financiero a la baja. Aun así, las tasas siguen entre 35% y 50%, altos niveles que frenan créditos más ambiciosos.
Con una inflación mensual en torno al 2% y un consumo que no despega, el gobierno enfrenta dos desafíos centrales:
- Acumular reservas, para lo cual un dólar quieto ayuda.
- Impulsar la actividad, para lo cual un dólar más alto sería conveniente.
Este dilema cambiario marca el ritmo del desarrollo económico. El financiamiento externo de Estados Unidos podría ayudar a equilibrar la ecuación.
En paralelo, las empresas revisan competitividad interna, ajustan costos hasta donde es sostenible y ponen el manejo de caja como eje del “pasa–no pasa”. La presión fiscal sigue pesada y con medidas polémicas en provincias, como la doble cuota del impuesto inmobiliario en Buenos Aires, que los autores califican como “si pasa, pasa”.
Más luz sobre la corrupción
Casos como Vialidad y Cuadernos vuelven a exhibir mecanismos de corrupción pasados, mientras que situaciones recientes —como la de la Andis— muestran que nadie está a salvo de tentaciones.
La sociedad muestra menos paciencia, la justicia avanza con mayor visibilidad y el periodismo vuelve a ocupar un rol clave. Según el informe, la competitividad país depende también de sus instituciones, por lo que este proceso debería profundizarse.
Empresas en plena actividad
La campaña está a pleno: cosecha fina en marcha y siembra gruesa avanzando, con clima complicado en partes de Buenos Aires. La helada de noviembre impactó en zonas puntuales, aunque la Bolsa de Cereales mantiene su proyección de 24 Mt de trigo.
La suba internacional de la soja —por el acuerdo entre EE.UU. y China— impulsa a muchos productores a cambiar lotes de maíz por soja. En ganadería, la actividad continúa siendo el sostén de la caja, salvo en zonas con excesos hídricos.
Negocio agrícola: precios mejores, pero con cautela
El acuerdo comercial entre Washington y Beijing movilizó el mercado: China prometió comprar 12 Mt de soja en noviembre-diciembre y 25 Mt anuales, llevando alzas en el CBOT. Sin embargo, el mercado duda: ¿qué pasa si China no cumple los primeros envíos?
En Argentina, la mejora se reflejó parcialmente. La soja mayo volvió a niveles del “veranito sin retenciones”, lo que mejora sus márgenes frente a otros cultivos y encarece arrendamientos.
El trigo confirma buenos rindes, salvo zonas afectadas. Con un saldo exportable estimado en 15 Mt, los precios seguirían presionados a la baja.
Recomendación del informe:
Aprovechar la suba de soja para coberturas sin comprometer físico y vender trigo antes que después, al menos hasta fin de cosecha.
Nuevo índice del agro: un paso institucional clave
La Bolsa de Comercio de Rosario lanzó el Índice de Actividad de la Cadena Agropecuaria (IACA), el primero que mide mensualmente a un sector que representa 20% del PBI y 60% de las exportaciones.
Incluye tres ejes: cultivos, agroindustria y agroexportación. Un avance institucional que faltaba en el país.
Negocio ganadero: precios firmes y tendencia sostenida
La oferta ganadera muestra una caída del 10% en la faena diaria, frenando la liquidación. Con una demanda internacional fuerte y un consumo interno estable en 45-50 kg/hab/año, el escenario favorece precios altos.
En un año donde la inflación ronda el 30%, los aumentos fueron contundentes:
- Ternero: +70%
- Novillo/Novillito: +90%
- Vaca gorda: +80%
- Vaca conserva: +60%
Los feedlots se vacían lentamente y el país deberá apuntar a aumentar peso de faena para ampliar oferta sin más vacas.
En el plano internacional, EE.UU. bajó aranceles para Argentina —la cuota pasó de 10% a 0%— y evalúa ampliar cupos. Brasil, con carne 20-30% más barata, sigue siendo el gran competidor global.
Negocio lechero: ingresos que no alcanzan y un mercado frío
El precio Siglea de octubre fue $475,43/litro, apenas 0,2% arriba del mes previo. Con inflación anual superior al 30%, el deterioro es evidente.
La producción creció 10% interanual, superando los 11 mil millones de litros, gracias a una primavera favorable. Sin embargo:
- Industria con stocks altos
- Consumo deprimido (175 litros/hab/año)
- Demoras en pagos y presión sobre bonificaciones
Las exportaciones (25% del total) encuentran precios internacionales más bajos: la leche en polvo ronda 3700 USD/t, tras haber estado en 4200 USD.
El informe remarca que la expectativa mejora recién a mediano plazo. Mientras tanto, la receta es conocida:
eficiencia, prudencia en inversiones, cuidado de talentos y caja bajo control.
El informe de Zorraquín y Meneses muestra un país que cambia lentamente, un campo que sigue siendo motor, y empresas que deben actuar aun cuando el futuro se vea difuso. Porque —como dice Turing— “hay mucho por hacer”.
Fuente: Zorraquín & Meneses
Informe: “Apuntes para Empresas – Noviembre 2025”


