La proliferación de tractores chinos por distintas partes del mundo ya no es novedad y, en todo caso, la noticia puede ser que otra empresa asiática se suma a la oferta.

Pero la ofensiva de China en cosechadoras todavía no está difundida y se debe, especialmente, a que aún es incipiente en los principales mercados del mundo.

El avance es encabezado por Lovol, que ha empezado por poner un pie en Europa del Este a través de un distribuidor en Polonia.

Los buenos resultados de este intento serán la llave para ingresar a otros países de la región.

En efecto, China planea expandirse a la República Checa, Eslovaquia, Rumanía y Hungría.

Argumentos

Como en el caso de los tractores, la propuesta china en cosechadoras se apoya en precios bajos y una mecánica sencilla.

Son los puntos principales de las cosechadoras Aupax que Lovol quiere posicionar entre los productores europeos.

En principio, una máquina de bajo precio suele despertar desconfianza en mercados más afines a las marcas globales.

Un valor menor se asocia, inevitablemente, a baja calidad, aunque en términos económicos sea más competitivos que el precio propuesto por las compañías occidentales.

También los productores se preguntan si dispondrán de repuestos y un adecuado servicio posventa.

A campo

La mejor manera que ve Lovol de torcer la actitud de los productores polacos y convencerlos de las ventajas de sus cosechadoras es mostrarlas en dinámicas a campo.

Por esto, junto a su representante, maneja una intensa agenda de demostraciones por distintas regiones de Polonia.

“Si los usuarios prueban las máquinas ellos mismos y consultan las opiniones de otros agricultores, tendrán la confianza de que el equipo es confiable», afirma Kevin Duan, directivo de Weichai Lovol.

«Si los productores ven la máquina en funcionamiento, la prueban y se aseguran de que cuente con soporte local, tendrán más probabilidades de confiar en la nueva marca», agrega.

Particularidades

Las cosechadoras chinas provocan cierto asombro por características inusuales, como la cabina con volante a la izquierda, algo poco común en Europa.

“Enfatizamos el diseño simple y la facilidad de uso, lo que se traduce en menores costos operativos”, responden los representantes de Lovol cuando se les hace notar esa diferencia.

Las demostraciones a campo se realizan con la cosechadora axial GM100 y la cosechadora convencional GV100.

Ambos modelos están equipados con motores Weichai, de 4 cilindros, 4.100 cc y 190 CV de potencia.

¿Podrán conquistar algún nicho de cosecha en Europa, iniciando una avanzada china en el mercado global de cosechadoras?

Por Jorge Freites
Fuente: MaquiNAC