La semana pasada fue poco alentadora.

Y la actual, lamentablemente, acaba de empezar, con precios en baja.

La jornada en Chicago, este lunes, fue francamente decepcionante. Noviembre cayó USD 8,64 y Enero bajó USD 8,45.

La trilla en EE.UU. está comenzando y ello, obviamente, no da soporte a los valores de la soja. El buen tiempo y el cielo despejado permiten su avance, con la cosecha de soja aún en las primeras etapas

Este proceso negativo en los valores se da pese a la evolución a la baja en la oferta total de soja en dicho país, desde la campaña 2021/22.

El verano fue caluroso y seco. Por lo tanto, es probable que se hayan reducido los rendimientos de los cultivos, por debajo de las últimas estimaciones del USDA.

Pese a la baja en la oferta estadounidense…

Lógicamente ello está afectando e incidirá en los volúmenes de exportaciones.

Y ésta no es la única razón.

Al haber un mayor consumo, fundamentalmente por el aumento de la demanda de aceite para la industria, peor será el cuadro exportador.

Tanto es así que la estimación, para la campaña 2023/24, sobre el volumen de exportación apenas llega a 49,67 millones de toneladas.

El gráfico provisto por la BCR es elocuente.

Acá se ve claramente, el proceso a la baja en la oferta.

Así también, se aprecia la abrupta caída en las exportaciones desde la campaña 20/21, cuando habían alcanzado un nivel superior a 60 millones de toneladas. En la próxima serían aproximadamente 10 millones menos.



Sudamérica

A partir de ahora el juego principal se efectúa en el hemisferio sur, que es la marca la incertidumbre sobre la oferta futura a nivel global.

Los precios no sólo se forman con la realidad del presente, también se establecen en base a expectativas.

De acuerdo a la consultora AgRural ya comenzó, en Brasil, la siembra de soja 2023/2024, con un avance sobre el 0,2% del área prevista, frente al 0,1% de igual período de la campaña anterior.

Pese al optimismo generado por la excelente cosecha, la situación en Brasil no es del todo óptima.

En Estados productores del sur, como es el caso de Mato Grosso, los perfiles muestran un nivel de humedad por debajo del promedio. Ello dificultaría el avance con la siembra.

Respecto a nuestro país, la situación es claramente mejor que hace un mes. Pero no es del todo halagüeña.

El Niño no se hace realidad. Y hay zonas con bajo nivel de humedad.

Desde el punto de vista de lo descripto, uno debería dudar de que los precios sigan deprimidos, al nivel actual.