Fluorita Córdoba es una empresa que realiza, desde hace 50 años, extracción y trituración de fluorita y serpentinita. Además produce fluoruro de calcio a través de un sistema de beneficio por flotación, único en el país. Sus centros de explotación de mineral son el grupo minero Cerros Negros y la cantera La Maga. Ambos minerales son estratégicos en la producción de acero, electrodos y cemento. Eso por un lado.

Por otro, sus dueños siempre quisieron darle un “valor agregado” a la explotación y devolverle algo bueno a la tierra y a la población. Por eso crearon Alma Minera, un viñedo pensado como un proyecto para derribar mitos y prejuicios sobre la actividad minera. “No teníamos experiencia en esto, pensamos estratégicamente el proyecto. Armamos un suelo artificial a 1.300 metros de altura (el más alto de Córdoba) con el grano que sobraba de la fluorita, no hay nada igual ni existe otro en el mundo y se presentó ante la OIV (Organización Internacional de Vitivinicultura). Además, es el viñedo más al sur de la provincia, dentro de la ruta del vino”, explica Gonzalo Martinez, gerente de Operaciones de Alma Minera.

El suelo y la plantación se realizaron hace casi 10 años y en 2018, a 4 años del cultivo, se produjo la primera vendimia de 1.000 kilos de uvas malbec, demostrando que las terrazas construidas con el material estéril podían dar sustento adecuado al viñedo. Son 3 hectáreas de plantación que dieron lugar a ocho variedades de vid (malbec, cabernet sauvignon, cabernet franc, syrah, tempranillo, tannat, chardonnay, sauvignon blanc).
La amplitud térmica allí es marcada, tienen muy buena insolación y vientos que secan el exceso hídrico que es el gran problema para los cultivadores de vid. En definitiva el “terroir” (o tierra, suelo) terminó siendo el ideal para este proyecto.

De Calamuchita al país

Alma Minera superó sus expectativas de producción y alcanzó un rápido rendimiento que la empresa no esperaba. La media en Córdoba está en cultivar frutos y ver el resultado entre 5 y 8 años, acá se dio a los 4 años. De una media que se estima de producir 4.500 kilos por hectárea, levantaron 17.000 kilos (el equivalente a 13.000 litros de vino).

El gerente de Operaciones comenta que normalmente los suelos que se usan para viticultura son pobres, a los cuales le viven agregando fertilizantes porque carecen de estructura y de minerales: “En este caso es grande la cantidad de materia orgánica que tenemos, nuestro suelo tiene fósforo, mucho nitrógeno y componentes que ayudan a la planta a estar saludable para producir y después tener el manejo y seguimiento”. A pesar de cuestiones climáticas adversas la plantación ha mantenido un alto nivel de calidad debido a la gestión efectiva y cuidadosa.

Desde Fluorita Córdoba tuvieron la visión de convertir el viñedo en un proyecto autosustentable y siguen trabajando a pulmón para lograrlo, brindando empleo a personas de localidades aledañas y creando un producto que cumple con todas las condiciones, además de remediar las marcas que la actividad minera deja en el entorno natural.
Alma Minera está concebido como una fuente de desarrollo regional y es por eso que la uva, la mano de obra y todo el proceso de vinificación, etiqueta y embotellado se realiza con un equipo de trabajo especializado para el proyecto; transfiriendo, de esta forma, tecnología y conocimientos a la comunidad. Fluorita entiende a la sustentabilidad como un verdadero compromiso ético y social con el ambiente y con la población.

La proyección de los dueños es continuar con el cultivo y ampliar las hectáreas y las variedades de vid.

Actualmente Alma Minera está en tratativas para ser apto turismo y ofrecer un espacio de gastronomía y degustación, además de mostrar la zona y el proceso de minería. Se pueden pedir y comprar sus vinos a través de su cuenta de Instagram y luego coordinar el envío. Sus precios son:

Roble $2.300
Blend $2.000
Malbec $1.800
Blanco $1.500
Rosado $1.000 (500ml)

Fuente: Infonegocios.info