El martes y el miércoles de esta semana fueron jornadas de precios en baja, tanto para el maíz como para la soja.

En ambas jornadas, el mercado de Chicago prácticamente calcó el recorrido del precio del petróleo.

Así como cayó el petróleo, así se redujeron los precios del maíz y de la soja.

En definitiva, ellos son componentes del combustible no fósil.

El gráfico nos muestra el recorrido del petróleo Brent desde el día 29 de diciembre. Ahí vemos cómo a partir del día 3 de enero comenzó un fuerte camino en baja.

Se trata de 4.50%, el martes. Y algo más de 5%, el miércoles.

Detengamos la mirada en el Brent. El valor del barril de petróleo, para entrega en marzo, después del martes siguió su senda negativa. Y el miércoles bajó hasta el nivel de 77,84 dólares cerca de su valor mínimo en el año 2022.

Contribuyen a las bajas del maíz y de la soja, las perspectivas de producción en Brasil.

El caso del maíz es notable. Merece destacarse el comportamiento exportador de este país que ha exportado cerca de 6,5 millones de toneladas de maíz, en diciembre pasado. Se trata de una suba de aproximadamente 90% respecto al mismo mes del 2021.

Obviamente, tal cuadro estimula las bajas.

Brasil también va a tener una excelente cosecha de soja, si no sucede algo extraordinario que golpee la situación productiva.

El cuadro productivo de Brasil más los potenciales recortes en la demanda global, sobre todo por la situación sanitaria de China, presionan a la baja de valores, pese a la persistente sequía en nuestro, que país limita las caídas.

China preocupa a los inversores y a los exportadores. La ausencia noticias sobre la demanda, dado el problema de contagios por Covid que no logra ser contenido, pesa fuertemente en el ánimo general.

Por si esto no fuera suficiente, existe el temor, que viene creciendo últimamente, sobre una eventual contracción económica a nivel global.

En tanto, en la Argentina, las lluvias no han logrado mejorar sustancialmente el panorama.

Sin embargo, los agricultores no ceden al embate y, actualmente, siguen sembrando.