MEJORAS PARCIALES

Por estos días los sistemas frontales han venido generando tormentas en sectores dispersos de la región pampeana. La actividad se ha mostrado más continua en el oeste, con eventos en el NOA, sur de SdE, CB, centro y sudeste de BA. De esta manera irregular se espera que las tormentas con lluvias de variada intensidad cubran toda la región pampeana hacia el día domingo, dejando seguramente una oferta de agua muy heterogénea, mejor del centro para el norte del país.

El frente de la fiesta navideña llegó casi dos semanas después de lo que hasta ahora son las lluvias más importantes de diciembre. En aquella oportunidad, la perturbación sirvió para dar fin a una importante ola de calor. Algo de humedad ha ingresado, pero hay que remarcar que los vientos del este han sido los predominantes, algo que limita fuertemente la eficiencia del transporte de las masas de aire tropical. En consecuencia, el avance del sistema frontal encuentra menos humedad disponible para promover el desarrollo homogéneo de sistemas precipitantes y las tormentas se generan en forma sectorizada, reaccionando a la dispar carga de humedad que tiene la atmósfera. Hace mucho tiempo que la región pampeana no presenta un sistema frontal con una oferta de agua homogénea, esto es una condición decisiva a la hora de que se concreten recargas de perfil significativas.

Como mostramos en otras ocasiones, dimensionamos la demanda de precipitaciones para las próximas dos semanas, partiendo de la actual condición de humedad de los suelos, la cual claramente presenta un predominio de sequía. Los requerimientos pluviales son muy significativos. Recordemos que estos requerimientos están asociados a la recuperación hasta reservas adecuadas del primer metro de suelo, es decir no sólo recargas superficiales.

Como vemos en el mapa, toda la zona núcleo presenta una demanda superior a los ciento veinte milímetros, algo que uno puede esperar a lo largo de todo el mes de diciembre. No abundaremos demasiado en la descripción del mapa, dado que el mismo es bastante elocuente y obviamente dimensiona con mucha claridad al problema que nos estamos enfrentando en esta transición hacia el mes de enero.

Veremos cuál es la respuesta que se suma durante el domingo. El primer día de 2023, puede llegar con lluvias generosas para SF, oeste de ER, este de CB, SL, LP y oeste de BA, con precipitaciones generalizadas en el resto del país, pero con milimetrajes más pobres.

Si la frecuencia de frentes y eventos pluviales se mantiene dentro de un rango de cinco a siete días, podremos encontrar el primer indicio de la progresiva mejora pluvial asociada a un menor efecto negativo del fenómeno de La Niña. La mejora aún está por llegar, el domingo puede ser un buen alivio.