Abril se convertirá en un mes áspero para los bolsillos de aquellos que viven en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense. Desde el viernes próximo, las tarifas del transporte -más específicamente los boletos de colectivos y trenes- aumentarán hasta un 100 por ciento.

Además, según anticipó el Gobierno, el valor del pasaje del subte también sufrirá incrementos, de un 66,6 por ciento. Pero esa actualización tarifaria recién llegará dentro de dos meses, y siempre y cuando la decisión logre superar el proceso legal correspondiente en la Ciudad.

Pese a las subas, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, informó que se ampliará la tarifa social para sectores vulnerables y afirmó que los beneficios serán más "agresivos": habrá descuentos en los pasajes del transporte de hasta 55% respecto de los precios actuales para jubilados y pensionados, beneficiarios de planes sociales (Argentina Trabaja y Ellas Hacen), trabajadoras de casas particulares, ex combatientes de Malvinas, quienes cobran asignaciones universales (y programas Jefes y Jefas de Hogar y Progresar) y aquellos con monotributo social y pensiones no contributivas.

La tarifa mínima del colectivo costará $ 6, cuando en la actualidad tiene un valor de 3 pesos. Sin embargo, la tarifa social será de 2,70 pesos. El tren pasará de a valer entre $ 2 y $ 4, según la línea utilizada por el usuario . Hasta hoy, el mínimo se pagaba entre 1 y 2 pesos. En este caso, la tarifa social estará entre $ 0,90 y 1,80 pesos, se indicó. En cuanto al valor del boleto de la red de subterráneo porteña, se calcula que en dos meses pasará de 4,50 a 7,50 pesos.

Sin embargo, el cambio más relevante es que el Gobierno dio el primer paso para cambiar el modelo de gestión del sistema de subsidios, que ahora comenzarán -a través de la tarjeta SUBE- a destinarse directamente a los usuarios en vez de a las empresas, lo que implica un avance tanto en la progresividad como en la transparencia.

Según supo LA NACION, el pasaje multimodal no se implementará aún: Trasporte trabaja en un proyecto con un plazo de dos años. Sin embargo, Dietrich afirmó que los aumentos en los boletos de trenes y colectivos disminuyen cuanto mayores son las distancias. Esto buscará minimizar el impacto de las subas para aquellos que deben tomar varios transportes para llegar a la ciudad, generalmente a trabajar.

El aumento tarifario no frenará el drenaje fiscal. Los subsidios para sostener el sistema de transporte se incrementarán en un 20% este año. En el Gobierno advirtieron que, sin los retoques que regirán desde el 8 de este mes, los desembolsos hubieran sido mucho mayores. El año pasado se destinaron $ 51.096 millones -una cifra apenas superior a lo que se gasta en la AUH en un año- para mantener sin cambios el sistema. Sin subsidios, el valor técnico de la tarifa del colectivo sería de entre 13 y 13,50 pesos, estimó Dietrich.

Estas compensaciones son parte de una fuerte inequidad regional impulsada por el kirchnerismo a favor de la zona metropolitana (que suma casi el 40% del electorado nacional). Por ejemplo, en la actualidad, el colectivo cuesta $ 9,15 en Córdoba, $ 8 en Bariloche; y $ 7,50 en Neuquén.

La protesta en el Palacio de Hacienda por despidos de trabajadores estatales sirvió de excusa para que se suspendiera la conferencia de prensa que Dietrich pensaba dar a las 9.40 en el microcine. Finalmente se realizó en la Casa Rosada cerca del mediodía. En esa mesa, Dietrich no estuvo solo. Lo acompañaron empresarios del sector y el secretario general de la UTA, Roberto Fernández. "El sindicato fue muy protagonista en el trabajo que hicimos con todos los sectores", aclaró Dietrich. La UTA informó ayer que su paritaria cerró en un 29 por ciento. "Reconozco el aporte que hizo Fernández", aclaró el ministro.

"El kirchnerismo hizo populismo con la tarifa", criticó Dietrich en diálogo con LA NACION. "Nos dejaron una bomba de tiempo, empezando por las inequidades", agregó el ministro y citó lo que cuesta el transporte en Chubut o Jujuy (entre $5 y $ 6).

Dietrich explicó que con estas modificaciones "cambia la forma" en la que se pagan los subsidios. "Por primera vez, redujimos los ingresos al sector empresario" y agregó que están trabajando en diferentes formas de mover el dinero de las compensaciones para ganar más transparencia. Indicó además que cualquiera que quiera cobrar la tarifa social deberá tener una "SUBE nominada". Tal posibilidad podrá tramitarse a través de la página www.sube.gob.ar, por teléfono al 0800-777-SUBE (7823) o en las oficinas de Sube y el beneficio se cargará automáticamente en la tarjeta del beneficiario.