PABLO ANTÚNEZ
Las lluvias esperadas en muchos casos no llegaron y en otros no dieron para nada. La zona agrícola más complicada es Young, en Río Negro, donde en sojas de primera hay mortandad de plantas y las segundas precisan agua urgente.
Las sojas no están salvadas y algunos maíces tienen sus rendimientos prendidos de un hilo, porque en varias zonas agrícolas los pronósticos de lluvia fallaron y en otras, el agua no dio para nada.
El monitoreo de agua en el suelo que hace el INIA/Gras está mostrando durante los primeros diez días de enero una reducción importante del nivel de agua, respecto al registrado en diciembre. Hay niveles críticos en el Norte, Centro y Este del país (ver gráfico aparte).
En la zona de Young (Río Negro), una de las más comprometidas debido al déficit hídrico, casi lleva un mes sin llover. Los 25 milímetros que se registraron antes de la pasada Navidad impulsaron a muchos productores a realizar las siembras de segunda. La humedad del suelo fue suficiente para que las plantas nacieran, pero no agarraron más agua y muchas de esas chacras tienen mortandad de plantas que ya son importantes.
"Está muy difícil y las sojas están sufriendo mucho, con mortandad de plantas importante en las siembras de primera y a esta altura, si no llueve urgente, las de segunda se perderán", le dijo a El País Roberto Symonds, empresario agrícola de Young, con una amplia experiencia en el rubro.
En esta zona del país "se ven sojas de primera que están floreciendo y se ven flores abortadas", agregó Symonds.
En el caso del maíz, los que se están salvando van a rendir muy poco, principalmente lo que son maíces tempranos. "Muchos alcanzaron a agarrar algo de agua en la floración y están dando algo de grano, pero rendirán muy poco y éste es un cultivo muy caro", explicó el entrevistado. En otros casos, hay muchos maíces de primera que habrá que picarlos y usarlos para alimentar al ganado, como sucedió el año pasado.
Symonds dijo también que la falta de agua se ve también en las plantaciones nuevas de eucaliptos (árboles con 1 metro de altura), porque desde fines de diciembre se vienen secando de a poco.
Por su parte, Carlos Ramírez de la Sociedad de Fomento de Colonia Valdense (Sofoval) dijo anoche a El País que "las lluvias no dieron para nada, porque no superaron los 5 milímetros" y muchos productores quedaron esperándolas. "En algunas zonas de Colonia no llovió nada y se sigue esperando el agua", dijo gráficamente.
Colonia no es de las zonas peores, pero a esta altura, como en muchos otros departamentos, los cultivos están mostrando la falta de agua. "También aquí lo más complicados son los cultivos de segunda y algunos maíces que están empezando a florecer. Hay cultivos que están muy comprometidos", aseguró el representante de Sofoval.
Mientras tanto, el ministro de Ganadería, Daniel Garín, dijo anoche a El País que "se releva información a nivel de referentes en la ganadería del Norte del país, para ver cómo evoluciona el déficit hídrico". En base a ella y a los mapas climáticos se dará la visión oficial.


