Tras los festejos de Navidad y Año Nuevo, el campo se muestra preocupado, porque los pronósticos climáticos vienen complicados tanto para el maíz como para la soja, cultivos que ya sufren las consecuencias del efecto de “la Niña” por la falta de lluvias.
De acuerdo al informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), en el sur de Santa Fe, el centro y norte de Buenos Aires y el sudeste de Córdoba, durante diciembre de 2011 las precipitaciones no superaron los 20 milímetros.
De hecho, los analistas consideran que diciembre es el mes más seco en los últimos cuatro años, por debajo del promedio, con valores que llegan a 105 milímetros menos que la media 2008/2011.
Dante Romano de la corredora Alabern Fábrega, comentó en su reporte matinal que el estado actual de los pronósticos marca que no habrá grandes cambios de esta tendencia en los próximos días, porque no se esperan precipitaciones en la región. A esto se suman las altas temperaturas, que favorecen la disminución de la humedad en el suelo.
En cuanto al sorgo, -la situación de los cultivos es de regular a buena por el déficit hídrico- mientras el algodón -comienza a manifestar dificultades por la escasa disponibilidad de agua útil en los perfiles de suelo.
Desde Foro Agropecuario, los productores sumaron temas de discusión al respecto. En la zona de Chacabuco comentaron que la situación “es complicada: la ultima lluvia fue el 22 de diciembre y cayeron entre 4 y 8 mm. que sólo sirvieron para regar y para hacer malas apuestas, esto disparó muchas siembras por el hecho de creer que la lluvia del 30 de diciembre sería factible, el problema fue que la lluvia no cayó y que los nacimientos comenzaron a ser desparejos, con la semilla en el surco pero sin germinar”.
Y agregaron que “las perspectivas son peores porque la lluvia próxima que se indica en los servicios meteorológicos es para el 10 de enero, así que si llegamos a esa fecha sin agua lamentablemente tendríamos que estar resembrando después de pasada la primera quincena del año nuevo”.
Respecto de los maíces en la zona, indicaron que “los mismos ya están florecidos, y pese a que no estiman en cuánto estarán las perdidas, lo que se escucha por la zona es que hay ganas de picarlos y ponerse a ganar kilos, el tema es tener un sistema integrado”.
Productores de la localidad bonaerense de Junín, declararon que “mientras pasan los días estamos cada vez mas comprometidos, parece que hay mucha gente que sólo mira el mercado y no se preocupa por ver si tendrá algo para vender en el mercado”.
En el afán de hacer números, Mariano, un productor de la zona anteriormente mencionada, comentó que se encuentra con “posiciones en 27 qq. para soja en campo alquilado sin tener en cuenta gastos de estructura, así que ese es el limite para cambiar la plata, algunos pensarán que con el aumento de los mercados este limite se ajusta, en mi caso no porque ya había decidido poner pisos a mis costos y ahora que le están poniendo techo a mis ingresos por el clima, se está complicando”.
Facundo, otro productor de la zona, coincide con Mariano en lo lamentable de la situación por el clima. “En la empresa en donde trabajo hay un fideicomiso de siembra, elaboramos informes mensuales del estado de la situación de los cultivos. Las conclusiones del informe de este mes son que la falta de humedad está provocando mermas de los potenciales de rendimiento especialmente en lo que refiere a maíz, lo sigue soja y por ultimo girasol”.
Asimismo, apuntó que “a la fecha la disminución de rinde potencial fue relativamente baja, pero los suelos están muy secos y si la seca persiste podrían resentirse mucho los rindes, a corto plazo del maíz, y si persiste del resto de los cultivos. Hay que recordar que si es que lloverá en estos días- nos quedan aun los meses de Enero y Febrero con perfiles de suelo muy secos- los cultivos de maíz y girasol se asegurarían con una pronta lluvia, pero la soja es la que quedaría en la situación más delicada, con suelos secos, esto sumado a que enero y febrero son los meses en que la soja necesita más humedad, por tal motivo es un situación difícil la de hoy”.
“Si lloviera dentro de 4-5 días y luego se regularizaran las lluvias, solo perderíamos algo de rinde, pero si no cambia y no almacenamos agua en el perfil para próximos meses, las pérdidas podrían ser muy grandes”, advirtió Facundo.
Y agregó que “en Junín, la última lluvia importante fue la del 26 de noviembre de 40 mm., luego, de la semana del 20 de diciembre cayeron unos 5-8 mm., aunque en algunas zonas de alrededor, como los Toldos o 9 de Julio tuvieron más suerte y les cayeron unos 35-40 mm. en esa fecha”.
En cuanto, a los pronósticos, el Ing. Agr. Eduardo Sierra, comentó que se darían unas lluvias generales en la región para el 10 de enero, las mismas se presentarían en toda la zona núcleo, con lo cual se espera que ayuden a revertir la actual situación.
Respecto a la pronosticada del 10-11 de enero, Facundo declaró que “llegar hasta ahí sin precipitación asusta un poco, ya que el daño en maíz sobre todo es importante y no creo que resista tanto alguna soja temprana. Por otro, el problema que tienen aquellos campos es que están a la espera de sembrar la soja de segunda o de resembrar aquella que no nació”.
En suma, el comentario general es que los maíces están arrojando pérdidas, la soja resiste y el girasol, al momento, se encuentra en buen estado, sólo que hay zonas en donde resta cosecharlo y cobrarlo.


