Fernando Bertello
LA NACION


Pese a haber aplicado una dura política de cuotificación de las exportaciones de trigo y trabas que llevaron a que hoy, en plena cosecha, los productores estén a punto de lanzar medidas de fuerza porque afrontan dificultades para vender su mercadería, la intervención del Gobierno en este sector no logró contener los precios del pan ni de la harina, que registraron fuertes subas.

Según un informe realizado por Guillermo Aiello, de la firma 3-El Semillas, desde 2006, cuando empezó la intervención del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, sobre este cultivo, en promedio el precio del pan subió 200% y la bolsa de harina de 50 kilos, 108 por ciento, mientras que el valor del trigo al productor registró un incremento del 55% en los últimos tres años, es decir, porcentualmente aumentó menos que el pan para el consumidor.

"El precio del pan difiere mucho según el lugar y el tipo de pan, pero en 2006, antes de la regulación del mercado, era de $ 2 pesos el kilo y actualmente vale $ 6, con lo cual el aumento fue del 200%", señaló Aiello. El valor actual considerado es en promedio, ya que se puede conseguir este producto también a $ 8 en no pocos puntos de venta, lo que representa una suba más fuerte, del 300 por ciento.

En su informe, Aiello comentó que en 2006 el valor de una bolsa de harina era de 25 pesos, pero hoy está en $ 52. "El molino recibe subsidios del Gobierno [desde 2007 la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca) ya repartió compensaciones por $ 2248,4 millones a molinos trigueros] y aun así aumentó la bolsa de harina un 108%", subrayó.

Según Aiello, en el costo de un kilo de pan la incidencia del valor del trigo es de sólo 13%. Para hacer un kilo de pan hacen falta 830 gramos de harina, y para tener esa cantidad de harina se requieren 1,14 kilos de trigo, según señaló.

Si el consumidor paga más el pan, en la otra punta de la cadena, donde está el productor de trigo, el resultado de la política intervencionista no fue tampoco favorable. Hoy el productor tiene un 55% más de precio que en 2007, pero por la cuotificación de las exportaciones y la ausencia de una competencia permanente por la mercadería entre exportadores y molinos los agricultores sufren un fuerte descuento en el precio.

Según Néstor Roulet, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez), hoy con un "precio real" de $ 670 por tonelada, los productores tienen un valor $ 185 menos que los 855 pesos que serían de capacidad real de pago por parte de los compradores.

En este contexto, Aiello contabilizó cuánto resignaron en plata los productores por las distorsiones en el mercado, ante molinos y exportadores. Según su trabajo, la cuenta da 1730 millones de dólares desde 2007, de los cuales US$ 575 millones corresponden sólo durante este año. De acuerdo con el especialista, en 2010 los exportadores, en negocios con Brasil, estuvieron logrando un valor de US$ 250 la tonelada por un mercadería que adquirieron a US$ 175 la tonelada.

Clima de protesta

Según explicó, lo que los productores cedieron frente a exportadores y molinos es equivalente a haber pagado 6,3 millones de jubilaciones mínimas, abonar la jubilación mínima mensual a 131.062 jubilados durante 4 años o haber entregado 3460 millones de raciones a comedores escolares.

Entre los productores hay un clima de protesta a punto de estallar. El viernes pasado, en una asamblea en San Cayetano, Buenos Aires, más de 200 productores trigueros se mostraron a favor de solicitar a la Comisión de Enlace un cese de comercialización y bloqueos a molinos y terminales portuarias.

A todo esto, pasado mañana habrá un acto con volanteada en el túnel subfluvial que une las ciudades de Paraná y Santa Fe, donde asistirían los cuatro presidentes de la Comisión de Enlace, y el jueves se realizará una nueva asamblea de productores en Monte Buey, Córdoba.