Eduardo De Bonis, socio del área de Finanzas Corporativas de Deloitte, está a cargo de la unidad de negocios que hace de nexo entre China y la Argentina hace tres años. "El apoyo bilateral es fundamental. Es una vía rápida para establecer relaciones para empresas a las que les interesa hacer negocios", comenta.
"Hay un interés evidente y creciente de parte de China por incrementar su relación con América latina. La principal razón es porque somos productores de recursos que para ellos son estratégicos", explica De Bonis.
Según el ejecutivo de Deloitte, el país oriental comenzó a invertir en economía real con el objetivo de diversificar el riesgo. Principalmente pusieron la mirada en industrias que ellos después demandan.
"De esta manera ellos son consumidores y formadores de precios al mismo tiempo. Es decir, hacen la inversión y son demandantes", explica. Pero, antes de trabajar, el especialista deja un consejo: "Es importante tener paciencia y apertura de mente", aclara.
Por su lado, Enrique Fernández Taboada, director comercial de la Cámara de la Producción, la Industria y el Comercio Argentino-China, asegura que el futuro para la Argentina es brillante.
"Somos un gran exportador de alimentos y el mundo camina hacia éstos. Principalmente, China y la India, que son los países más poblados", asegura.
Según Fernández Taboada, en el mundo existen pocos proveedores de alimentos que puedan aumentar su producción. "Tenemos un potencial, pero es importante cultivar una política de Estado hacia China. Si lo hacemos, vamos a seguir siendo proveedores y no solamente de aceite y granos de soja, sino que se sumará el aceite de girasol, los vinos y el tabaco", ejemplifica.
"Todavía no tenemos solucionado el conflicto del aceite de soja. Esperamos que luego de la visita de la Presidenta haya una solución. Los chinos nos están ayudando. Ellos tienen un plan para América latina", concluye Fernández Taboada.


