Ese fue el motivo del reciente 1er. papelón exterior de Boudou, durante la cumbre del Mercosur, en Paraguay, cuando demostró no tener conocimiento de los números de la economía que, se supone, debe administrar.
Hasta la fecha se ignora cuál es el enfoque de Boudou frente a una economía que está complicándose a diario, y lo más grave es que además se conoce que Roberto Feletti, el Nº2 de Boudou, ya trabaja con llamativa autonomía pero no tiene intelecto suficiente para hacer de ministro.
La consultora Economía & Regiones realizó una apretada síntesis de qué esta ocurriendo en la coyuntura:
La política fiscal excesivamente expansiva atenta contra el nivel de actividad económica de la industria. Una política fiscal que hace crecer el gasto primario a un ritmo superior al de la expansión de los ingresos tributarios, no sólo se consume el superávit primario, sino que termina impactando negativamente en el sector industrial vía dos canales:
i) apreciación del tipo de cambio real y
ii) fuga de capitales.
El excesivo aumento del gasto público genera presiones inflacionarias que aprecian el tipo de cambio real, quitando protección (competitividad) a la industria sustituidora de importaciones (agroindustria exportadora) y por ende, impacta negativamente en el nivel de actividad del sector industrial. En otras palabras, las política fiscal de la administración K no es sustentable porque destruye el principal pilar del actual modelo económico (el tipo de cambio real elevado).
De este modo, sin acceso a los mercados de financiamiento voluntarios, una política fiscal excesivamente expansiva, erosiona el superávit primario (única fuente de financiamiento genuina); y por ende, pone en duda la sustentabilidad del programa financiero (las fuentes de financiamiento heterodoxas –ANSES y Banco Nación se acaban).
En este marco, la política fiscal muy expansiva genera fuga de capitales, que impacta negativamente en el nivel de actividad del sector industrial, ya que implica menor consumo y menor inversión.
Adicionalmente, la fuga de capitales tiene como contrapartida una suba de la tasa de interés que, procurando morigerar la caída de la demanda de dinero, el exceso de demanda de dólares y la presión sobre el tipo de cambio, también atenta contra el consumo y el nivel de actividad.
En los primeros seis meses de este año la tasa de crecimiento del gasto primario superó, en promedio, por 22.3 y 15.1 p.p. a la tasa de expansión de los ingresos tributarios y totales del SPN; respectivamente.
En este marco, al comparar la primera mitad de este año con el mismo período del año anterior, se observa que las cuentas fiscales del sector público nacional (SPN) experimentaron un gran deterioro, ya que el superávit primario se redujo un 65% (-$13.138 millones), cayendo de $20.309 millones (2008) a $7.172 millones (2009).
La reducción interanual del superávit primario del SPN se debe a que el gasto primario (+$25,789 millones) aumentó mucho más que los ingresos (+12,651 millones) del sector público durante la primera mitad de este año.
Estimador Mensual Industrial
En el mes de Junio la actividad industrial exhibió una leve recuperación al presentar un incremento interanual del 1%. A su vez, según los datos anticipados del Estimador Mensual Industrial (EMI) que elabora el INDEC, la producción del sector aumentó un 0,6% (sin estacionalidad) respecto de Mayo de 2009.
Por último, los últimos seis meses del año acumulan una reducción del 1,4% interanual.
Según el informe publicado por el instituto de estadísticas, el rubro industrial que presenta la mayor caída es la industria metalúrgica con una reducción interanual del 29%.
> Le sigue la automotriz con una caída anual del 12% aproximadamente, además de acumular una reducción del 31,1% durante los primeros seis meses del año.
> A su vez, la industria textil junto con los sectores ligados a la refinación de petróleo exhiben una merma anual del 13% y del 1,2% respectivamente.
> Del otro lado, la industria alimenticia exhibió un incremento anual del 21%, en tanto que exhibió una merma del 8% respecto del mes pasado. Dentro de este rubro se destaca el incremento anual de la producción de molienda de cereales y oleaginosas (44%), carnes rojas (38%), carnes blancas (17%), lácteos (8,7%) y azúcares y productos de confitería (22%).
Finalmente, la fabricación de minerales no metálicos (insumos para la construcción), se expande un 4% a/a, impulsada por la producción de cemento y “otros materiales para la construcción”.
Utilización de la Capacidad Instalada
En el mes de Junio, la utilización de la capacidad instalada en la industria1 se ubicó en el 70,8%. Esto representa una reducción de 0,8 puntos porcentuales respecto de Mayo de 2009 (71,6%) y una reducción de 1 punto porcentual en relación al mismo mes del año anterior (71,8%).
Desde el punto de vista sectorial, los bloques industriales que presentan una mayor utilización de la capacidad instalada son las empresas dedicadas a la refinación de petróleo, las productoras de edición e impresión, de productos químicos y de papel y cartón y textiles.
Por otra parte, entre los sectores que registran los menores niveles de utilización se encuentran los fabricantes de vehículos automotores, la industria metalúrgica, la industria metalmecánica (sin automotrices) y los sectores productores de tabaco.


