El mercado también estará atento al informe WASDE del martes, que tradicionalmente no introduce cambios relevantes en la producción estadounidense, y al posicionamiento de los fondos, que en octubre registraron el mayor flujo comprador en 14 meses. En Sudamérica, los pronósticos de lluvias mantienen el foco en el avance de las siembras y el potencial productivo.
En definitiva, la nueva semana encuentra a la soja atrapada entre fundamentos pesados, una demanda china que avanza con cautela y señales climáticas que no ofrecen soporte. La estabilidad del mercado depende cada vez más del ritmo de compras chino y de cómo el informe oficial reconfigure el balance global.
Por Esteban Moscariello


