Disponibilidad hídrica

Las precipitaciones registradas a mediados de octubre mejoraron notablemente las reserva hídricas en gran parte del área de estudio. Los perfiles presentan condiciones adecuadas en la mayoría de los partidos del centro y sur bonaerense, así como en sectores del este
pampeano.

Solo se mantienen niveles regulares a escasos en el noroeste bonaerense y norte de La Pampa, donde las lluvias fueron menos generalizadas. La recarga hídrica favorece el llenado de granos de los cultivos de fina y mejora las condiciones para el inicio de la gruesa.

La imagen muestra la temperatura del aire registrada por el satélite el 28 de octubre, a las 6:00 am. Para determinar el riesgo de helada, se debe considerar que la temperatura a nivel de suelo puede llegar a ser 3 a 6° C inferior a la temperatura del aire. Por otro lado, la delimitación entre zonas con diferentes temperaturas (distinto color) puede considerarse como un indicador de la intensidad del fenómeno.

La irrupción de aire polar desde el sur generó descensos de la temperatura durante los días 28 y 29 de octubre, y causó heladas de distinta intensidad en las provincias de Buenos Aires y La Pampa. Las estaciones meteorológicas registraron temperaturas mínimas por debajo de 0 °C en varios partidos, llegando hasta –2°C en algunas sectores del sur bonaerense y de La Pampa, extendiéndose en algunos casos por hasta tres horas. A pesar de la alta humedad ambiente, que puede atenuar los efectos negativos que tiene el frío en los cultivos, una proporción de los trigos se encontraban en etapas fenológicas próximas a la floración (antesis), siendo la condición de mayor susceptibilidad del cultivo a las bajas temperaturas.

Por otra parte, los cultivos de cebadas atravesaban etapas más avanzadas, corriendo un riesgo menor.

Algunos síntomas que comenzaron a observarse en algunos lotes fueron daños tanto en floración (aborto floral) como en llenado de grano en trigo y en cebada.

En la provincia de La Pampa, la intensidad de las heladas fue muy variable entre localidades; algunos cultivos no sufrieron daños mientras que en otros la pérdida implicó destinar los cultivos a la preparación de forrajes o pastoreo directo.

Similarmente, en la provincia de Buenos Aires las heladas impactaron con diferente intensidad, según las regiones. En los partidos de la zona norte las heladas habrían tenido un impacto menor en los cultivos, y algo mayor en el centro y sudoeste bonaerenses. El mayor daño se observó en los partidos de Guaminí, Coronel Suárez, Adolfo Alsina y Saavedra. Allí se registraron temperaturas por debajo de cero durante más de 6 horas, generando un daño completo en algunos lotes, y afectando tanto a cultivos de trigo que se encontraban en floración como a otros de cebada que estaban formando el grano. Algunos productores, incluso, ya comenzaron a realizar las labores necesarias para destinar los lotes afectados a la siembra de cultivos de gruesa.

ESTADO DE LOS CULTIVOS DE FINA

Los cultivos de trigo y cebada atraviesan las últimas etapas fenológicas. En general, las cebadas ya completaron la floración y están en estado de grano lechoso o pastoso, mientras que los trigos varían entre espiga embuchada (los sembrados más tarde) y llenado de grano (los sembrados a fines de mayo).

En general, la sanidad de los trigos es muy buena, y no presentan problemas mayores de enfermedades, a diferencia de las cebadas, que muestran síntomas de diferentes hongos con variada severidad. El daño por enfermedades es variable entre cultivos, aunque la incidencia es mayor en el sudeste bonaerense, donde algunos llevan 3 aplicaciones de fungicidas a la fecha.

En las próximas semanas comenzarían a cosecharse los primeros lotes de cebada, sembrados a fines de abril-comienzos de mayo.

PRONÓSTICOS

Durante noviembre, los acumulados de precipitación podrían alcanzar valores cercanos a los 100 mm, con las mayores concentraciones esperadas sobre el centro de la provincia. En cuanto al riesgo de heladas, la probabilidad de ocurrencia se redujo respecto del mes anterior, manteniéndose las mayores chances en sectores del sudeste bonaerense. Bajo este escenario, las condiciones resultan favorables para el avance de la siembra de cultivos de gruesa y el desarrollo inicial de los lotes implantados.

Fuentre: BCP - Estudios Agronomicos