El encuentro estuvo a cargo de profesionales de investigación y desarrollo en lechería de la Experimental, contó con la presencia de empresas que venden insumos para el desarrollo de la estrategia y permitió demostrar los beneficios que tiene esta práctica.

Cabe destacar que la estrategia se basa en estructuras móviles. Se inicia en una suerte de nave, para uno o dos terneros, durante los primeros 15 a 20 días de vida, que cuentan con un aislamiento del piso, entre una estructura metálica y madera, con cama de paja para mejorar el confort y la higiene, además de una lona superior para mayor reparo. Luego en grupos de 10 animales, pasarán a una cría colectiva que tiene demostradas ventajas de salud, socialización, mejor desarrollo y mejor manejo.

Si bien requiere de inversiones, los indicadores ya muestran en la Experimental Rafaela sólo el dos por ciento de mortandad, siendo todo complemento de instalaciones y manejo, para asegurar la sanidad (buen calostrado, vacunación y detección temprana de enfermedades), garantizar la nutrición, cuidar el estado mental de los animales, propiciar un ambiente adecuado y atender el comportamiento de la especie.

Por Elida Thiery
Fuente: El ida por el campo