Es fácil encontrar sinergias: la descentralización de blockchain puede equilibrar la centralización de la IA; la IA es opaca y blockchain aporta transparencia; la IA necesita datos y las cadenas de bloques son buenas para almacenar y rastrear datos. Todo esto es superficial, dice Vitalik Buterin, el cerebro detrás de Ethereum.

El joven decidió hablar por primera vez sobre la prometedora alianza entre ambas tecnologías. Y aunque ve caminos hacia innovaciones revolucionarias, advierte que cualquier convergencia requerirá una dosis adicional de precaución para garantizar la adopción y la confianza. Según él, los riesgos asociados con la seguridad y la transparencia requerirán medidas de protección sólidas. “Vale la pena andar con cuidado”, especialmente cuando se implementan nuevas aplicaciones en contextos de alto valor y alto riesgo.

La visión de Buterin considera que la descentralización de las criptomonedas y la centralización de la IA se equilibran en las siete capas en las que puede ocurrir la intersección: propiedad de datos, transparencia, reducción de costos, monetización, inclusión, innovación y competencia. En gran parte debido a las diferencias y fundamentos de la centralización y la descentralización.

También ve a la IA actuando en cuatro categorías del juego de intersección:

Como participante de un juego [mayor viabilidad]: IA participando en mecanismos donde la fuente final de incentivos proviene de un protocolo con aportes humanos.
Como interfaz para el juego [alto potencial, pero con riesgos]: las IA ayudan a los usuarios a comprender el mundo criptográfico que los rodea y garantizan que su comportamiento (es decir, mensajes y transacciones firmados) coincida con sus intenciones y que no sean engañados ni engañados.

Como definidor de las reglas del juego [tenga mucho cuidado]: blockchains, DAO y mecanismos similares que apelan directamente a las IA. Piensa, por ejemplo. “Jueces de IA”.
El objetivo [a largo plazo, pero intrigante] del juego: diseñar cadenas de bloques, DAO y mecanismos similares destinados a construir y mantener IA que pueda usarse para otros fines, utilizando los bits criptográficos para incentivar mejor el entrenamiento o para prevenir la IA. de la filtración de datos privados, es decir, su mal uso.

El trabajo de la IA como actor implica su compromiso directo en el proceso, interactuando frecuentemente con los usuarios de una plataforma. Por ejemplo, los usuarios pueden hacer preguntas y la IA presentará sus respuestas. Estos podrían basarse en el análisis de lo que ya existe en Internet.

Como interfaz de juego, la IA separaría a los usuarios de los peligros potenciales del mundo virtual. Si un usuario visita un sitio web sin determinar primero su estado de seguridad, la IA debe notificarle del peligro potencial. Básicamente, identificará la amenaza y emitirá una alerta temprana. Además, la IA podría proporcionar información sobre las Apps con las que interactúan los usuarios. “Mi opinión es que las interfaces de IA pura probablemente sean demasiado arriesgadas en este momento, ya que aumentan el riesgo de otros tipos de errores, pero la IA que complementa una interfaz más convencional se está volviendo muy viable”, dijo.

El objetivo central de la IA es llevar sus ventajas y mecanismos más allá de los límites de las blockchains. El protocolo NEAR, por ejemplo, está intentando hacer esto. Las razones son dos: asegurar a los usuarios que el sistema ahora está sesgado, pero se basa en la gobernabilidad democrática; y crear IA descentralizada con habilidades naturales para proteger el sistema contra la recepción de consultas de fuentes maliciosas.

El aspecto más desafiante de todo es que la IA actúa como reglas del juego. En esencia, documenta las regulaciones que rigen el sistema o empresa. Esto puede llevar a una toma de decisiones subjetiva o restringir la IA a los límites de un contrato o DAO para hacer cumplir las reglas. Independientemente de la implementación, Vitalik Buterin enfatiza que el modelo de IA no se puede mantener abierto, ya que permitirá a los atacantes descargarlo y estimularlo localmente. “Los modelos de IA de código abierto pueden ser vulnerables a ataques adversarios”, afirma.

No hace falta decir que las ideas de Buterin dividieron a la comunidad criptográfica. Muchos los consideraban pura fantasía. Otros creen que la audaz integración de la IA en la gobernanza de las criptomonedas y las cadenas de bloques podría generar aplicaciones revolucionarias. Y que la audaz idea de hacer de la IA la esencia misma de las criptomonedas, formando sistemas descentralizados, podría resolver los problemas de centralización. Pero, ¿qué pasa en nuestro sector?

En el agro, la integración de la inteligencia artificial y la tecnología blockchain está revolucionando la manera en que se gestionan los cultivos y se convirtió en una manera de asegurar la calidad de los productos. Mediante el uso de algoritmos avanzados, se pueden analizar datos en tiempo real sobre el clima, el suelo y el crecimiento de los cultivos, permitiendo a los agricultores tomar decisiones más informadas y precisas. Además, la tecnología blockchain garantiza la trazabilidad y transparencia en toda la cadena de suministro, lo que brinda a los consumidores la confianza de saber exactamente de dónde provienen sus alimentos y cómo fueron producidos, promoviendo así la seguridad alimentaria y la sostenibilidad ambiental.

En el próximo episodio de la serie realizada por nuestro especialista José Cuevas: Revolución AI: redefiniendo la industria agroalimentaria desde la raíz, ampliaremos aún más sobre como la IA está optimizando procesos. No te lo pierdas en nuestro próximo.

Fuente: Club Agtech