La industria frigorífica uruguaya puede comenzar a procesar carne bovina y ovina con hueso con destino a Israel, según confirmó a Rurales El País el Director General de los Servicios Ganaderos, Diego De Freitas.

Este destino quedó habilitado la primera semana del mes en curso (concretamente el lunes 8), luego de un trabajo conjunto que llevó años donde estuvieron involucrados el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, la Cancillería y el Instituto Nacional de Carnes (INAC). Las autoridades sanitarias y el sistema político de Israel terminó entendiendo que el aval de la Organización Mundial de Sanidad Animal (Omsa) en cuanto al status de fiebre aftosa de Uruguay, eran suficientes como para admitir que la carne con hueso no representa un riesgo, por más que Uruguay sea un país que se proteja y prevenga la enfermedad con el uso de la vacunación de los bovinos.

La decisión de Israel también sirve para abrir nuevos mercados para los cortes con hueso, apuntando al principio de que un país reconocido como libre de fiebre aftosa, lo sigue siendo aunque utilice la vacunación.

A la industria frigorífica uruguaya, la nueva habilitación le permite ampliar el abanico de productos colocados en Israel, que es un habitual importador de cortes delanteros, pero siempre los llevaba desosados y procedentes de las faenas Kosher.

Posteriormente, 8 días más tarde, cuando Uruguay celebraba todavía el hecho histórico de poder entrar con cortes con hueso en Israel, este país habilitó a Paraguay para exportar los mismos productos. Al igual que lo hizo Uruguay, las autoridades paraguayas calificaban la apertura como un hecho histórico. De acuerdo con información del INAC, en 2023 Uruguay exportó a Israel el equivalente a 10.807 toneladas peso carcasa, volumen que viene en caída respecto a los años anteriores. En 2022 se habían embarcado a este destino de Medio Oriente 14.272 toneladas carcasa y en 2021, 17.466 toneladas, por lo que el descenso fue de 24% en el último año y de 38% en dos años.