En el viaje de capacitación lechera a USA que realizamos este año con la Fundación Producir Conservando, tratamos diversos temas relacionados con la producción lechera y uno de estos fue la reproducción del rodeo.

Para discutir a fondo en este tema visitamos la Universidad de Wisconsin en Madison para tener una reunión con Paul Fricke, reconocido especialista en la materia. El gran interrogante que teníamos era el siguiente:

¿Cómo logran los americanos tasas de preñez superiores al 35%?

Según el Dr Fricke, existen dos puntos claves para tener una excelente reproducción en un rodeo lechero: uno es contar con un buen programa de fertilidad y el otro es lo que él llama, el ciclo de alta fertilidad.

Primero es importante entender que las vaquillonas suelen tener mejores índices reproductivos que las vacas, no por genética, sino por un tema hormonal. Estas cuentan con cuerpos lúteos más chicos, pero de mayor producción de progesterona, mientras que las vacas cuentan con cuerpos lúteos más grandes, pero de menor producción de progesterona.

Por otro lado, las vacas consumen más materia seca que las vaquillonas, producen más leche por día, menos progesterona, folículos más grandes y tienen más chances de poli ovulación (mellizos).

El gran desafío es lograr grandes producciones de leche y progesterona en vacas y para eso utilizan el protocolo de sincronización para inseminar a tiempo fijo llamado doble Ovsynch que les permite alcanzar los excelentes resultados.

¿En qué consiste el Doble Ovsynch? El Doble Ovsynch es un protocolo de inseminación a tiempo fijo desarrollado con el fin de superar limitaciones de la pre sincronización convencional. El presynch se reemplaza por un Ovsynch inicial y a los 7 días arranca el segundo Ovsynch. Estudios comparativos indican que las vacas tratadas con Doble Ovsynch tuvieron mejores tasas de concepción a la primera inseminación comparadas con las vacas en el tratamiento de Presynch- Ovsynch convencional. En consecuencia, se espera que Doble Ovsynch tenga mejor fertilidad de forma consistente en diferentes explotaciones lecheras y es por eso que es muy utilizado en los Estados Unidos.

El segundo pilar del éxito reproductivo planteado por el Dr Fricke es el ciclo de alta fertilidad. No todas las vacas pierden condición corporal post parto, algunas mantienen y otras ganan.

Diversos estudios demuestran que las mejores tasas de concepción a primer servicio se logran en animales que ganan peso post parto. Para lograr esto es clave monitorear la condición corporal del rodeo ya que, si el animal está en balance energético negativo y pierde peso, el éxito en la inseminación es muy bajo.

Con protocolos como el doble Ovsynch logran preñar el 90% de los animales (T.P 31%) entre los 76 (espera voluntaria) y los 176 días en leche DEL (en 100 días).

Preñar rápido y eficientemente es la clave para tener el rodeo con estado corporal óptimo y no gordo al secado. Así mismo, preñando rápido mantienen al rodeo en la zona más productiva de la curva de lactancia, por ende, como producen más leche, requieren más energía y no llegan con bajos requerimientos al final de la lactancia, donde se engordarían sí o sí.

Logrando secados con condición corporal (CC) 3 o 2.75 y manteniéndolo durante el secado y preparto, las vacas no pierden estado post parto, sino que lo mantienen toda la lactancia.

Fuente: Producir Conservando