Este lunes fue un día tranquilo.

No hubo actividad en Chicago por el feriado estadounidense en conmemoración del trabajo.

Es el Día del Trabajo (Labor Day), primer lunes de septiembre.

Fue el presidente Grover Cleveland quien, el 28 de junio de 1894, firmó la ley que convertía el primer lunes de septiembre de cada año en feriado nacional.

EE.UU. celebra el día del trabajo en una fecha distinta a la de la mayoría de los países del mundo que es el 1 de mayo de cada año.

Curiosamente, en esta fecha se rememora el comienzo, en 1886, de una huelga reivindicativa de la jornada laboral de ocho horas y que había llevado a la revuelta de

Haymarket de Chicago, tres días después, el 4 de mayo.

Por ello, en varias partes surge confusión al respecto.

No todas las noticias son malas.

Respecto a los precios internacionales, es interesante observar una tendencia que se viene registrando en el mundo, muy poco destacada.

Veamos el gráfico.

Futuros Índice dólar

Después de haber caído hasta un mínimo, el 17 de julio de este año, el dólar ha seguido casi ininterrumpidamente un recorrido en suba.

Es cierto que este lunes, por la expectativa de que la política de estímulo de China pueda estabilizar la economía, la realidad es que se nota claramente cómo viene en alza.
Pese a que el índice dólar bajó un 0,15%, a 104,08 unidades, lo importante es que se encuentra cerca del máximo de dos meses, de 104,44 que alcanzó el 25 de agosto.

Desde este punto de vista, el cuadro es favorable a los precios de los granos, y obviamente, de la soja que está sometida al mercado climático y la entrada de mercadería brasileña al mundo.

La falta de agua cesó. Este fin de semana, en nuestro país, hubo un cambio de cara. Pasamos de la extrema preocupación a la satisfacción por las lluvias caídas.

Se cumplieron los pronósticos generosamente.

En la zona núcleo, el volumen sorprendió gratamente. Llovieron de 30 mm a 100 mm. Increíble.

En el Noreste, las lluvias fueron todavía más voluminosas.

El problema está en el oeste, donde no hubo mayores cambios. Los cultivos de la zona pampeana, en la parte occidental, siguen sufriendo.

También es muy escaso el volumen en Entre Ríos.

El mapa nos da una idea.

Cierta parte de la incertidumbre va quedando atrás. Todavía falta mucho. Pero la esperanza es firme.

¡A no decaer!