Una carta, enviada el viernes pasado a sus clientes, por una empresa naviera especializada en operaciones de comercio exterior, luego de la publicación de comunicaciones del BCRA alerta a las empresas sobre supuestas demoras en las operaciones de fletes de relacionadas con las importaciones y exportaciones.

La carta de la empresa a la que accedió Iprofesional hace referencia a la Comunicación A 7746 del BCRA publicada el jueves pasado en referencia "al acceso al mercado de cambios para el pago de servicios a contrapartes vinculadas con el exterior"

Luego menciona que: "Hasta que finalicen las interconsultas por notas aclaratorias e instrumentación de estas se suspenderán los pagos de las operaciones de Importación y Exportación y los pagos recibidos serán imputados como pagos a cuenta en (ARS Pesos) una vez establecidas las cobranzas".

Expresa además que: "cualquier duda o consulta solicitamos tengan a bien comunicarse con nuestro depto. de Consumer Service" y agrega un email para que los clientes se comuniquen.

Al final la carta detalla: "permaneceremos atentos y estamos tratando de regularizar el proceso de cobranzas tan pronto sea posible".

Dura carta dirigida a Pesce, Massa y Tombolini

Por otra parte el Centro de Navegantes envió una carta muy dura dirigida al presidente del BCRA Miguel Pesce, al ministro de Economia Sergio Massa y al secretario de Comercio Matias Tombolini acusando al BCRA de desconocer los standars vigentes en el transporte marítimo global y reclamó al directorio "la modificación inmediata de la Comunicación A 7746 para poder permitir a las Agencias Marítimas efectuar libremente las remesas correspondientes a los pagos de fletes y servicios facturados por cuanta y orden de Arnadores de conformidad con la normativa cambiaria aplicable sin que las mismas queden supeditadas al previo y obligatorio cumplimiento de plazo alguno".

Además expresa que "el diferimiento de pagos ordenado por el BCRA concecuencia de su administración de divisas escasas puede provocar en un breve lapso de tiempo que no lleguen al país ni una "chata aguatera" un concepto muy aplicado en el comercio marítimo.
El Centro de Navegantes explicita que: "el BCRA desconoce que los buques que vienen hasta la Argentina se apartan de las líneas convencionales de tráfico para llegar a los puertos con escaso volumen de carga y que a veces ni siquiera tienen calado suficiente y es esas circunstancias no se entiende que el BCRA quiera diferir los pagos".

También advierte al BCRA que "se están lesionando los interes de los actores que conforman la cadena de logística local convirtiendo a la Argentina en una especie de Puerto Sucio con pérdida de producción trabajo e ingreso de divisas por millones para todos los argentinos por exigir el cobro de fletes offshore (fuera del país)".

El Centro de Navegantes acusó al BCRA de desconocer los standars vigentes en el transporte marítimo global

El texto hace referencia también a la Comunicación A 7746 del BCRA que traba el funcionamiento de las agencias marítimas y le reprocha a las autoridades que ya se había alertado sobre el tema a la Asociacion de Bancos de Argentina el año pasado.

Cómo tomaron la medida las empresas

El dueño de una de las empresas locales líderes en el mercado explicó a Iprofesional que muchas empresas multinacionales como aerolíneas y navieras quedarán muy afectadas por estas medidas y para nosotros es una situación imposible de manejar por la actual incertidumbre cambiaría".

El anticipo de mayores restricciones cambiarias a la operatoria de comercio exterior se confirmó en el mercado financiero el jueves por la tarde a última hora luego que el BCRA emitiera las comunicaciones A 7746 que es una especie de cepo ampliado para el pago de servicios de flete y la A7747 que es complementaria a la anterior.

Esta última es un pedido de información mucho más exigente que el que existía con anterioridad que solicita número de CUIT, monto y código de operación, motivo y la información de si el proveedor es controparte vinculada a otra empresa exportadora o importadora vinculada a posibles importadores para poder acceder al mercado libre único oficial de cambios(MULC).

Se trata de medidas que obligan a financiar el pago de la importación de servicios profesionales y de fletes entre empresas vinculadas. Las mismas fueron anticipadas por

Iprofesional el 7 de abril pasado.
Además, se dispuso la autorización previa para el pago de intereses en deuda intraempresas. Todo esto, en conjunto representa una postergación de pagos en divisas por u$s2.000 millones hasta fin de año.
El BCRA explicó además que en el caso de que el acreedor sea una contraparte vinculada al

deudor, se requerirá hasta fin de año la autorización previa para acceder al mercado de cambios para pagar servicios de intereses de deudas comerciales por importaciones de bienes y servicios y/o de préstamos financieros con el exterior.

Complementariamente, el directorio del BCRA habilitó a las empresas a que realicen imposiciones remuneradas por dólar oficial por el importe en pesos equivalente a los intereses no cancelados o la utilización de divisas de disponibilidad propia que apliquen al pago de compromisos cuando el acreedor sea una contraparte vinculada.

Lo concreto es que el viernes pasado ese tipo de operaciones se vieron paralizadas desde muy temprano porque no funcionaba el validador del la AFIP y muchas empresas de fletes, despachantes de aduana y bancos esperaban las respuestas de los departamentos de comercio exterior y del área de legales para saber cómo debían operar.

La semana que comienza estará muy condicionada además por muchas versiones y rumores que corrieron como reguero de pólvora en distintas reuniones este fin de semana de empresarios relacionados con el comercio exterior y el ambiente de las finanzas.

El viernes temprano por la mañana antes de la apertura de los mercados hubo una señal de alerta que preocupó a los funcionarios del ministerio de Economía del BCRA.

Rumores de devaluación

Un informe de una consultora financiera, redactado en inglés, alertaba a sus clientes sobre la posibilidad de una devaluación del peso frente al dólar o salto cambiario del 50 % a partir del lunes y además expresaba que la duda a nivel local era si el ministro de Economía Sergio Massa seguiría en el cargo luego de la devaluación en caso que esta se produjese.

Esa sería una de las causas por las cuales en las últimas horas antes del cierre de los mercados el valor del dólar CCL llegaba a un récord de 451 pesos el dólar MEP a los 435 pesos con un BCRA que aumentó la tasa de interés del 78 al 81 % anual y aceleró el ritmo de devaluación del peso en el mercado oficial libre y único de cambios (MULC ) a un valor del 7 por ciento mensual y lanzó nuevas medidas para ampliar el cepo cambiario.

El informe de esa consultora no dista mucho de lo que analistas de bancos y consultoras locales y de Wall Street han informado a sus clientes y donde advierten varias preocupaciones.

Lo que sorprendió en el mercado finaciero y en Wall Street fue que el ministerio de Economía iniciaría acciones legales contra esa empresa finaciera y además le solicitaría a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que la intervenga. La casa de bolsa o AlyC pidió disculpas a través de un comunicado.

Hay que destacar que el informe de esa empresa finaciera señalaba que era muy probable que el presidente Alberto Fernández anunciara la renuncia a su reelección y que el BCRA no permitiría que ninguna empresa importadora o exportadora podría acceder al mercado de cambios y que las operaciones se reanudarían el lunes o martes próximo.

Los rumores acerca de un nuevo plan económico elaborado por el renunciado Antonio Aracre y la posibilidad que Sergio Massa abandonará el ministerio de Economía se empezaron a disipar el viernes a última hora luego de una difícil jornada del jueves cuando a través de dos fotos el gobierno dio a conocer que Massa se reunió primero en Olivos con el presidente Alberto Fernández y luego con el presidente del BCRA Miguel Ángel Pesse.

En esta última reunión ambos habrían coincidido con respecto a que por ahora no es necesario un fuerte ajuste del tipo de cambio. "Ni loco Sergio va a hacer una devaluación del peso antes de hacer eso se va" manifestaban el viernes a última hora fuentes cercanas al ministro frente a las consultas de empresarios y banqueros.

La corrida cambiaría que se inició 27 de marzo el día posterior al que Mauricio Macri anunció que no sería candidato presidencial en las próximas elecciones llevó al valor del dólar paralelo de 385 a 442 pesos y el riesgo país a un nuevo récord de 2600 puntos.

El problema que agrava la falta de dólares en la economía es que ningún exportado vende sus dólares al precio del dólar oficial

El paso posterior a una corrida cambiaría es una corrida bancaría que empieza por una caída de los depósitos en dólares que salen del sistema finaciero local y los depósitos en pesos se transforman en dólares y también se van del sistema finaciero.

La primera ya empezó desde principios de abril y la segunda está más contenida por el cepo cambiario que genera más dificultad para trasformar eses pesos en dólares y sacarlos del sistema finaciero.

El gobierno sigue optando por la situación más compleja que es el aumento de las restricciones para obtener dólares al tipo de cambio oficial en lugar de devaluar el peso en una magnitud importante.

En esa dirección van las medidas dadas a conocer por el BCRA el jueves pasado con la que la autoridad monetaria buscaría ahorrar unos 2.000 millones de dólares.

El problema que agrava la falta de dólares en la economía es que al precio del dólar oficial ningún exportador vende sus dólares y todos quieren comprar esperando la devaluación futura que seguramente llegará en algún momento.

El otro problema es que en la medida que el dólar paralelo y los finacieros alternativos suban la ventaja de los exportadores del agro y de las economías regionales de liquidar a un tipo de cambio diferencial como el dólar Agro a 300 pesos se reduce notablemente.

Es probable que en el comienzo de esta semana las nuevas medidas frenen gran parte de las operaciones de importaciones porque todavía los despachantes de aduana y los importadores están tratando de adecuarse a las nuevas normativas.

Fuente: Iprofesional