La falta de agua, lluvias por debajo de lo normal en el último semestre, con acumulados de muy bajo milimetrajes en ese período, y en algunas regiones solamente, han llevado a los cultivos a una situación crítica desde la siembra a la formación de las espigas, impactando fuertemente en el desarrollo y macollo de los cultivos. Las heladas de octubre y el 1°de noviembre han provocado que los cultivos que estaban en un período de floración no logren el llenado del grano o reduzcan el peso de los mismos, lo cual se sumará a las pérdidas por la sequía reinante en el área productiva.

El panorama con el trigo es desolador. En algunas zonas se ha convertido en rollos o pastoreo para los animales y, comparándolo con el promedio de los últimos diez años, lo que se va a acopiar va a ser significativamente mucho menor a campañas anteriores.
Los cultivos antes mencionados no han sido los únicos afectados, también la arveja, lenteja y por la crisis hídrica en las zonas bajo riego y las fuertes heladas han diezmado las producciones de las Economías Regionales.

La situación angustiante que se vive en ganadería, lechería, por la falta de pasto, sin reservas y la imposibilidad de comprar alimento por el alto costo del mismo ha provocado la venta forzada de rodeos de invernada y vientres.

Los pequeños y medianos productores necesitamos que se implementen mecanismos de ayuda que den respuesta a una situación de emergencia, que permitan pasar un período que se presenta muy crítico para poder seguir produciendo.

Fuente: FAA