El HLB –Huanglongbing– es la enfermedad más destructiva de las plantaciones cítricas en el mundo, causada por la bacteria Candidatus Liberibacter spp. La dispersión de la enfermedad responde al traslado de material vegetal enfermo y a la presencia del vector Diaphorina citri, como agente de diseminación. Al no tener cura, la prevención se basa en el uso de material sano, el monitoreo constante del cultivo y del insecto vector, su control y en la identificación temprana de la planta infectada para su eliminación.

La enfermedad se encuentra presente en gran parte del continente americano. En la Argentina se registra desde 2012 y en Paraguay desde 2013. Por esta razón y, por la existencia de más de 226 hectáreas con cítricos y más de 6000 citricultores familiares en la cadena citrícola de la región, un equipo de investigadores y extensionistas de diversas instituciones promueve la implementación del Manejo Integrado de Plagas y enfermedades (MIP), por sobre la aplicación rutinaria de agroquímicos no selectivos que generan riesgos y daños en el ambiente. El trabajo se enmarca en el proyecto cofinanciado por el Fondo Regional de Tecnología Agropecuaria (Fontagro) “Control sustentable del insecto vector del HLB en la citricultura familiar en Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia”.

Los resultados fueron presentados en el marco del seminario virtual “Experiencias sobre el control y erradicación de la enfermedad de los cítricos HLB en América Latina y Caribe” organizado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) Venezuela.

Durante el encuentro se presentaron los avances de la prevención y control del HLB en América Latina y el Caribe, con la participación de especialistas de México, Venezuela, Argentina y Brasil, que favorecieron el intercambio de información, el panorama de la prevención y el abordaje de la problemática, y los retos que enfrenta actualmente la región.
Desde la Argentina, Silvana Giancola, líder Proyecto Fontagro, expuso los resultados del Manejo Integrado de Plagas (MIP) en lotes demostrativos y convencionales ubicados en establecimientos citrícolas familiares en tres países, Argentina, Uruguay y Paraguay.

En este sentido y, “a partir de los monitoreos periódicos que se realizan en estos lotes, se evidenció una disminución del 21 % de individuos de Diaphorina citri –vector de HLB– y un aumento del 60 % de enemigos naturales”, señaló Giancola.

Además, Giancola explicó otros hallazgos que demuestran que el MIP permitiría reducir costos directos de producción, a partir del control oportuno de plagas y enfermedades y uso de productos más amigables con el ambiente, impactando positivamente en la calidad de la fruta cosechada.

Estos resultados se obtuvieron luego de trabajar con datos comparados en dos campañas de implementación del MIP (2020 y 2021) en una red de 13 pares de lotes ubicados en establecimientos citrícolas familiares de los respectivos países. Cada par de lotes o sitio del proyecto cuenta con un lote demostrador (LD) –con MIP– y un lote convencional (LC) –con manejo tradicional– de similar superficie, misma especie y variedad cítrica.

“El monitoreo del vector de HLB y enemigos naturales se realiza de manera periódica –cada 15 días o una vez al mes, dependiendo la época del año–mediante la aplicación de 3 métodos: observación visual de brotes, tarjetas adhesivas y golpeteo de ramas, lo que permite mejorar las posibilidades de detección”, expresó Giancola.

También se realizaron en lotes del proyecto las dos primeras experiencias de liberación masiva de la avispita Tamarixi radiata –parasitoide específico del vector de HLB– en lotes comerciales en la región, a partir de la cría masiva de este enemigo natural, que se realiza en la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en Bella Vista –Corrientes, Argentina–, en el marco del convenio: INTA-FONDAGRO, y en el Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) Salto –Uruguay–, en el marco del convenio: INIA- UPEFRUY-MGAP.

Este proyecto internacional, cuenta con la participación de más de cien investigadores y extensionistas de las siguientes instituciones: INTA y Fundación ArgenINTA como organismo ejecutor; INIA –Uruguay–,Universidad Nacional de Itapuá/Fundación Universitaria de Itapúa –Paraguay– y Gobierno Autónomo Municipal de Bermejo –Bolivia–, como organismos co-ejecutores; el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y la Federación Argentina del Citrus (Federcitrus), ambos de Argentina, y la Unión de Productores y Exportadores Frutícolas del Uruguay (Upefruy), como organismos asociados.

El estudio comenzó en 2019 y se extenderá hasta comienzos de 2024. El objetivo es adaptar, difundir y concientizar la tecnología Manejo Integrado de Plagas en el control del vector del HLB de los cítricos en la citricultura familiar en los países involucrados, por lo cual los lotes funcionan como unidad territorial del escalamiento de manejo sustentable del vector y prevención de HLB.

El Fontagro es un mecanismo único de cofinanciamiento sostenible para el desarrollo de tecnología agropecuaria en América Latina, el Caribe y España e instituye un foro para la discusión de temas prioritarios de innovación tecnológica. Sus iniciativas fomentan la inversión en investigación, desarrollo e innovación en el sector agroalimentario a través de la creación de ecosistemas institucionales público-privados en el formato de plataformas regionales de más de dos países.