El Ministerio de Agricultura y Ganadería puso en marcha hace siete meses el nuevo sistema de Receta Fitosanitaria Digital (RFD), una herramienta que aporta trazabilidad a la totalidad del sistema, que valida identidad a través del CiDi Nivel 2, con lo que agiliza y vuelve más eficiente el proceso vinculado al cumplimiento de la Ley Nº 9164 de Productos Químicos y Biológicos de Uso Agropecuario.

En este lapso se registraron 25.112 recetas, de las cuales 20.872 son abiertas y 4.240 cerradas, las cuales son la base para validar trazabilidad fitosanitaria dentro del Programa de Buenas Prácticas Agropecuarias (BPAs).

El sistema comenzó a funcionar en septiembre de 2021 y tiene como ejes centrales el valor otorgado a la georeferenciación, la precarga de lotes y la determinación de diferentes puntos sensibles como escuelas rurales, apiarios, producciones hortícolas y frutícolas, entre otros.

Esto permite delimitar polígonos en una imagen satelital, donde se realizan las aplicaciones, y gracias a la inversión que viene realizando el Gobierno Provincial para contar con todas las herramientas de Google, se han ido incorporando paulatinamente capas de información que mejoran la precisión de todo el circuito de toma de decisión.

Este novedoso formato se desarrolló íntegramente desde la Dirección General de Fiscalización y Control de la cartera agropecuaria. Tuvo una instancia anterior de prueba con talleres de capacitación para los usuarios responsables, que contó con la colaboración del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Córdoba.

En esta modernización del sistema se incluye un perfil autorizado para municipios y comunas, con el objetivo de ofrecer a las autoridades locales la información necesaria para fiscalizar y controlar sus ejidos y zonas productivas.

Funcionamiento

La generación del documento digital tiene dos etapas. Primero, la apertura o recomendación de uso a cargo de un Asesor Fitosanitario habilitado (ingeniero agrónomo) dirigida al Usuario Responsable (productor), que debe realizarse de manera previa al momento de aplicación, donde se determinan datos como el caso del centro poblado más cercano, cultivos a tratar, diagnóstico, tratamiento recomendado, el producto seleccionado, condiciones ambientales recomendadas, entre otros detalles.

La segunda etapa corresponde a la conformación o cierre de la receta. Esta puede estar a cargo del Asesor Fitosanitario, del Usuario Responsable o del Aplicador, y es vital para mejorar toda la trazabilidad del uso de este sistema.

Durante esta etapa deben informarse los datos del Aplicador y de la maquina utilizada; fecha y hora de inicio y fin de la aplicación; y dejar asentado los datos de las condiciones meteorológicas al momento de realizar la tarea. Desde esta plataforma, los usuarios podrán acceder a todos los datos de la Red de Estaciones Meteorológicas, al Registro Provincial de Agroquímicos y también a los Sitios de Almacenamiento Transitorio (SAT), para definir el destino final de los envases vacíos de fitosanitarios.