La entidad explica que cada célula, tejido y órgano del cuerpo necesita agua para funcionar correctamente y ayuda a:

Eliminar los desechos a través de la orina, la transpiración y las deposiciones.
Mantener la temperatura en niveles normales.
Lubricar y amortiguar las articulaciones.
Proteger los tejidos sensibles.
Aumentar la masa muscular.
Disminuir la retención de líquidos y a regular la presión arterial.
Evitar dolores de cabeza, cansancio
Evitar el estreñimiento.

No obstante, las personas creen que la única forma de hidratar el cuerpo es solamente tomando agua y esto no es así, ya que lo que se come también aporta agua y casi 100 % del peso de muchas frutas como la sandía, es agua.

Te dejamos las frutas ricas en agua, bajas en calorías y ayudan con el proceso de hidratación:

Sandía: por cada 100 gramos tiene 30 calorías (está compuesta en 93 % por agua).
Pera: cada 100 gramos tienen 57 de calorías (86,7 % de esta fruta es agua).
Fresas: cada 100 gramos de fresas tienen 32 calorías (tiene poco menos de 90 % de agua).
Melón: cada 100 gramos tienen 34 de calorías (87 % de esta fruta es agua).
Piña: cada 100 gramos tienen 48 calorías (95 % de este alimento es agua).
Pepino: cada 100 gramos tienen 12 de calorías (95 % es agua).

Importante señalar que el consumo diario por persona de frutas y verduras debería ser de cinco porciones (mínimo 400 gramos por día), según recomendaciones de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).