Un repaso por los rubros más relevantes del sector agropecuario uruguayo nos ayuda a comprender la vital importancia del segmento en el conjunto de la economía del país en donde se destinan 16,64 millones de hectáreas para la producción de alimentos. El Producto Bruto Interno en dólares corrientes en 2019 fue de 56.007 millones. El PBI agropecuario fue de 3.276 millones, calculados en moneda norteamericana.

Algunos datos ilustrativos: en el ciclo 2019/2020 de producción vegetal, se sembraron 1. 128 mil hectáreas en lo que se denomina superficie de chacra. En el mismo período, se implantaron 1 millón 598 mil hectáreas de cereales y oleaginosas.

En el país vecino, la soja lidera el rubro como el principal cultivo con 916.800 has sembradas por un total de 2.500 productores. La oleaginosa ocupa el 57% del área. La cosecha llegó a 1 millón 990 mil toneladas.

En 2020, se exportó soja por un valor cercano a los 748 millones de dólares. El principal mercado exportador es China. Uruguay, es el sexto exportador del mundo.

El trigo le sigue a la soja en términos de prioridades. En la misma etapa, se sembraron 237.500 hectáreas, cuya cosecha llegó a las 770 mil toneladas.

En maíz se sembraron 116.700 has, superando las 107.000 has del segmento 2018/2019. La cosecha alcanzó las 763 mil toneladas. En el caso del cereal, el aumento del área se explica por el favorable escenario de precios internacionales.

Clima propio

“En cultivos de verano lidera la soja con 2.500 kilos promedio según el año y, en menor medida, el maíz pero con tendencia a seguir creciendo. En cultivos de invierno, los climas son distintos a los de Argentina. Por ejemplo, allí la temporada es lluviosa y, en consecuencia, invita a sembrar tradicionalmente trigo y también cebada con programas muy importantes. Recientemente se incorporó como unidad de negocios la canola, colocando a Uruguay como un actor importante en la comercialización del producto en el mercado mundial”, opinó el consultor Rodrigo Bosch.

El factor lluvia promueve en Uruguay el desarrollo de cultivos tradicionales como el arroz, cuya siembra se realiza en primavera y se recoge en otoño. En el tramo 2019/2020, se implantaron 140.257 has y se cosecharon 1.209.031 toneladas. La producción se destina principalmente al mercado externo. En 2020 los envíos fueron por un valor de 434 millones de dólares.

Tradición ganadera

La industria y la producción bovina son el sector más dinámico de la economía uruguaya. Los uruguayos registran uno de los consumos per cápita más altos del mundo. El rodeo vacuno entre 2012 y 2019 se muestra estable con aproximadamente 11.411 cabezas.

En 2012, la industria frigorífica faenó 2.115.649 reses. La faena total de vacunos en 2019 llegó a 2.251.459 unidades.

“Exportan el 75 % de lo que producen a China. Tienen cupos de la Cuota Hilton y también participan en otros destinos de la UE. La industria frigorífica es muy importante, poseedora de una gran capacidad de producción. Hay una fuerte tradición ganadera que se desarrolla en campos mixtos conviviendo con la agricultura. La actividad forrajera es muy destacada con la presencia de compañías internacionales que operan en el territorio”, señaló Bosch.

En los años 2018/2019, sobre una superficie de pastoreo de 14,3 millones de hectáreas, se mejoraron pasturas en 2,6 millones de has. Es decir, un 18,3% del área total. En este sentido, el INIA viene realizando estudios para determinar si los sistemas de producción agrícola-ganadero del país están efectivamente secuestrando carbono con la aplicación de pasturas biodiversas.

En Uruguay, de cada 100 litros de leche ingresados a las plantas industriales, 70 se aplican en la elaboración de productos exportables. Según el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, “en 2019, la producción comercial de leche llegó a 2.168 millones de litros. La remisión de leche a las plantas fue de 1846 millones de litros. Hay 3.423 establecimientos lecheros y 2.532 plantas que remiten. En 2019 se incorporaron 104 mil hectáreas al esquema de producción. El 60% del área lechera operó con pasturas mejoradas y el rodeo total de animales lecheros fue de 759 mil cabezas.”

La producción láctea está concentrada sobre la costa de Uruguay, donde son muy fuertes las usinas de la empresa Conaprole, principal compradora de leche. Hay tambos importantes como el de la familia Bulgheroni, con 12 mil animales, y el proyecto New Zealand Farming con 30 mil vacas en ordeñe radicado en el centro y en el este del país.

Beneficios impositivos

En el mercado de tierras, desde el año 2000 al 2019, se realizaron 38.939 operaciones. La superficie transada fue de 8.547.504 has por un valor de 14.123 millones de dólares. El valor promedio por hectárea en ese momento fue de 1.652 dólares.

En materia de beneficios económicos, impositivos y ambientales, Uruguay hoy se presenta como un país atractivo. No hay impuestos a los Ingresos Brutos ni al cheque, acceso libre al dólar, estabilidad financiera y sin retenciones a las exportaciones más la meta de llegar al 2025 reduciendo a la mitad la emisión de carbono. Todos son argumentos que explican su previsibilidad.

Fuente: Redacción Mayo