El Ministerio de Industria y Comercio (MIC) convocó a sectores involucrados en la industria y comercialización de la carne para llegar a un acuerdo sobre los precios de la proteína. Los supermercados adelantaron que acatarán las medidas que apunten a reducir los valores, pero advierten que también deben sumarse los frigoríficos.

El presidente de la Cámara Paraguaya de Supermercados (Capasu), Alberto Sborovsky, no presentó una propuesta concreta, pero se mostró abierto a negociar una reducción de precios, ya sea en cortes populares o de primera. “En realidad, la propuesta debe venir también de los otros sectores involucrados. Nosotros como tomadores de precios lo que pedimos es poder comercializar los cortes de carne a un mejor precio. Capasu pondrá su granito de arena para que así sea, y estamos expectantes de que las otras partes puedan, también, sumarse a esta iniciativa de poder entregar a un mejor precio los productos de carne vacuna”, dijo con relación a la necesidad de la participación de la industria en la mesa de diálogo.

Sborovsky se reunió con el ministro de Industria y Comercio, Luis Castiglioni, quien estuvo acompañado del viceministro de Comercio y Servicios, Pedro Mancuello.

Se trata de la tercera iniciativa estatal para estudiar el comportamiento de los productos de la canasta básica. La primera surgió desde la Comisión Nacional de la Competencia, que empezó a levantar datos para entender qué factores influyen en la suba histórica; la segunda partió desde la Cámara de Diputados, que en su sesión del miércoles pidió informes a la Secretaría de Defensa del Consumidor y el Usuario (Sedeco).

LLUVIA DE QUEJAS. En las últimas semanas creció la cantidad que reclamos de los consumidores por los altos precios de la canasta básica, especialmente de la carne. Al respecto, el titular de Sedeco, Juan Marcelo Estigarribia, dijo que las quejas se reciben a través de redes sociales, llamadas telefónicas y por mensajería instantánea. Aclaró que si bien la institución no puede intervenir en temas de precios, mejoró su sistema de monitoreo semanal. Los últimos dos informes toman datos de 10 supermercados de Asunción y área metropolitana, cuando antes verificaba apenas tres o cuatro. También indica los precios máximos y mínimos para que los consumidores puedan identificar qué centro de compras está ofertando a un precio más accesible.

Aunque el monitoreo se extiende solo a Central, Estigarribia estima que el mismo comportamiento se da en los demás departamentos.

Cepo estabilizó valor en Argentina

Para controlar la inflación, influida fuertemente por los precios de la carne, Argentina decidió suspender las exportaciones de carne desde junio y liberar los envíos de manera gradual desde hace algunas semanas.

Esta medida frenó en julio y agosto la fuerte dinámica alcista y los distintos cortes mostraron una caída de 1% y 1,4%, respectivamente, de acuerdo al medio estatal Télam.

Si bien los consumidores lograron percibir estas reducciones, la cadena cárnica del vecino país rechaza la decisión. El Consejo Agroindustrial Argentino y la Mesa de Enlace, que integran varios gremios del sector agropecuario, argumentan que el cepo afecta tanto a la producción como a la generación de divisas.

Una medida similar no es una opción en Paraguay, lo había advertido el presidente del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal, José Carlos Martin, mientras que la industria recordó que en Argentina se habían cerrado frigoríficos hace una década por una medida similar que afectó a toda la cadena.

LAS CIFRAS

48.125 guaraníes es el precio promedio de la rabadilla, de acuerdo con el último monitoreo de Sedeco en 10 supermercados.

12 son los frigoríficos de exportación que destinan el 70% de su producción al mercado internacional, el resto queda en Paraguay.