La ley sobre el desarrollo adicional de la cuota de GEI, que se aprobó en el Bundestag alemán el 21 de mayo, aumentó la obligación de reducción de GEI del país del 6% actual, al 7% el próximo año y al 25% en 2030, según el informe.

La demanda de materias primas derivadas de biomasa, como la colza, aumentaría debido al nuevo objetivo, según la UFOP.

UFOP dijo que se esperaba que las plantas de biodiesel existentes cambiaran a colza y, en el corto plazo, aumentaría la demanda de aceite de colza para la producción de biocombustible, y no solo en Alemania.

Mientras tanto, la exclusión de los biocombustibles a base de aceite de palma se adelantó en la Unión Europea (UE) a 2023, dijo UFOP. Para 2022, la proporción de biocombustibles de aceite de palma en la UE se limitaría al 0,9%, lo que fortalecería la demanda de aceite de colza.

En 2020, se necesitaron alrededor de 3 millones de toneladas de biodiésel y aceite vegetal hidrogenado (HVO) en Alemania para cumplir con la cuota de GEI, según la UFOP.

De este total, se produjo un estimado de 1 millón de toneladas de biodiésel a partir de aceites usados. Sin embargo, con la implementación de RED II en todos los estados miembros, también se introducirían cuotas de mezcla de bio-querosene (basado en HVO) de aceites usados, dijo la UFOP.

Fuente: Bioeconomia.info - Emiliano Huergo